YO: Me encuentro en una caja. Y sólo tengo dos agujeritos por los que mirar hacia afuera. Por uno veo todo lo negativo de mi vida, por el otro todo lo positivo. Me siento encerrado, y aún sabiendo que podría buscar la forma de salir de esa caja (pues toda caja tiene una abertura), decido aferrarme al agujero por donde veo lo positivo, con la sensación de seguridad de que contemplarlo me hace sentir bien. Pero sigo dentro de la caja.

SOY: ¿Por qué?

YO: Por miedo, por temor a lo que me encontraré fuera. ¿Y si lo bueno que veía era sólo una ilusión?

SOY: ¿Y si lo malo que veías también es una ilusión? Pero al negarle, le desconoces, y eso da aún más miedo, le da más poder, tanto o más que a lo que te aferras como positivo.

YO: El negarle le hace más poderoso.

SOY: Es muy acotado lo que ves. Tu caja tiene dos agujeros, pero 6 caras.

YO: Entonces hay 4 perspectivas más que no estoy viendo.

SOY: La caja es como una cueva. Quien entra ve sólo dos posibles caminos: uno hacia lo profundo, hacia la oscuridad, y el otro del que viene, que es la luz, la libertad. Pero hay 4 más. El techo que genera el eco de la voz, los lados que sirven de cobijo y sustento, y el suelo donde me afirmo. Los 4 a tu alrededor, son las herramientas que conectan y dan sentido a lo que estaba separado.

YO: Tal vez, el temor surge de no saber dónde estoy, más que del hecho de no saber a dónde me dirijo.

SOY: La luz o la oscuridad. Mira, la luz da claridad, perspectiva, libertad, expansión. La Oscuridad da presión, pérdida del eje y sentido, contracción. Pero la cueva es sólo el camino al corazón de la montaña, donde se encuentran los minerales preciosos: el oro, la plata, el diamante…

YO: Alejarme de la Luz es encontrar la belleza en la creación, ¿no?

SOY: Sólo si te alejas de la Luz sabiendo que vienes de la Luz y que volverás a ella. Cada vez que entras a la pirámide, entras al corazón de la montaña. Un túnel rocoso te aleja de la luz del sol, llevándote por pasillos estrechos, con cavernas de techos escalonados, hasta que entre el calor y la humedad, pasas por el último pasaje, donde encuentras el Cubo, el Corazón de la Montaña. Entras a ella para buscar los tesoros más preciosos. Algunos esperaban que fuera oro, joyas… Pero la verdad es que el tesoro es la Alquimia de quien transforma su carbono en luz.

YO: La pirámide es una montaña entonces… Donde buscamos el tesoro en nuestro interior.

SOY: Mejor aún, la pirámide es la Tierra. Y entras para buscar el tesoro del Mundo. Pero la verdad es que no permaneces allí, porque sabes que perteneces afuera, que recorrerás el mismo sendero hacia lo externo, hacia la Luz nuevamente, y el sacrificio que fue recorrer sus pasillos, se convertirá en libertad, expansión, y podrás compartir sus tesoros con todos los demás.

YO: ¿Por qué el interior de la Pirámide es una caja, un cubo?

SOY: La pirámide no sólo posee un cubo vacío en su interior, sino que está hecha por cubos de granito. El Cubo es la materialización del Merkabah.

YO: ¿Cómo?

SOY: Toma un tetraedro. Ahora, multiplícalo por dos, combinándolos. Uno apuntando hacia el cielo, y el otro apuntando hacia la tierra. Obtendrás en 2 dimensiones la Estrella de David, y en 3 dimensiones, un Merkabah. Ahora, conecta los 8 vértices con líneas, y “voilà”, un Cubo. La pirámide no fue construida con simples bloques rectangulares o cúbicos. Fue construida con merkabahs. Tantos, que es una enorme maquinaria cuántica, capaz de viajar en el tiempo, y hacerte mover en el espacio. Todos son cubos, la Tierra está compuesta de cubos, así como las sales.

YO: Es decir que cada uno de nosotros, activando nuestro merkabah, es un cubo; somos la cueva y corazón de la Tierra.

SOY: El elemento Tierra es la unión de ambas polaridades, todas las dimensiones y sus trinidades unificadas y fortificadas. La unión de todos los potenciales del universo se manifiesta en la materia que les unifica.

YO: Yo Soy la Caja…

SOY: Para salir de la caja, debes convertirte en ella. Cada cara contempla un potencial: 3 observan la Mente, la Emoción y la Acción. Y los otros 3 observan la Sabiduría, la Voluntad y el Amor. Entonces, el único miedo posible, es el de saber de lo que eres capaz al hacerte dueño de los 6 potenciales.

YO: Mi miedo, a lo que desconozco, es tan sólo yo mismo dándole la espalda a lo que me rodea, mirando sólo una dirección.

SOY: Danza a tu alrededor, gira, contempla todo, y verás que esos dos agujeritos que te mostraban lo malo y lo bueno, eran sólo una idea, pues fuera de la caja, todo está conectando, el mundo es Uno.

YO: El objetivo nunca fue salirse de la caja, siempre fue ser la caja.

SOY: Exacto. Allí radica la verdad. Enciende tu merkabah, conviértete en la cueva, sé la montaña, transfórmate en la Tierra.

YO: Es por ello que la mayoría de las personas viven entre el bien y el mal, entre lo positivo y lo negativo, buscando escapar de la realidad, salirse de esta Tierra. Porque miran acotadamente por las grietas de la caja. Pero el Mundo no es limitado, los límites son tan sólo los que nosotros ponemos sobre la realidad.

SOY: Cuando dejas de estar encerrado en la caja para ser la caja, eres libre en el mundo, artífice de tu propia creación.

YO: ¿Cómo me convierto en el Cubo, pues?

SOY: Enciende los 2 Solsticios y los 2 Equinoccios junto a los 2 Polos Norte y Sur. 6 Caras del Cubo, en ti. Los Polos se llaman Mente y Sabiduría, los Solsticios se llaman Emoción y Amor, y los Equinoccios se llaman Voluntad y Acción. Entonces, pregúntate:

• ¿Es la mente quien te controla, o tú eres la mente?
• ¿Vives para obtener conocimiento o para despertar Sabiduría?
• ¿Utilizas la Emoción para crear, o es la Emoción la que te crea a ti?
• ¿Amas incondicionalmente aceptando toda existencia o amas con condiciones a lo que existe?
• ¿Tienes voluntad para transformarte, o es el mundo quien pone su voluntad sobre ti?
• ¿Accionas tú para vivir o reaccionas ante los estímulos de la vida?

SOY: Despertarás el creador y la creadora en ti. Pues así saldrás de la Caja, y serás la Caja, serás la Tierra.

YO: Yo Soy la Tierra.

SOY: Yo Soy el Cubo.