YO: ¿Por qué relacionamos siempre el Amor con el Corazón?

SOY: Bueno, deberíamos identificar primero qué es el Amor y qué es el Corazón.

YO: Corazón, según leí una vez, proviene del vocablo “krid” en indoeuropeo, que significa “saltar”. Y de ella derivan las raíces a todos nuestros idiomas más usados, como “kardio” en griego y “cor” en latín; y por el lado del norte de Europa el vocablo “hrd”, dando origen a los sonidos “hërz”, “hart”, “heart” de las lenguas sajonas. O sea, interpreto que está relacionado al latido, y cómo el corazón parece saltar cuando bombea la sangre.

SOY: ¿Y el Amor?

YO: Amor viene del latín, “a-mors”, que significa “sin muerte”. Es decir, Eterno. Aquello que nunca se detiene y es constante.

SOY: Por lo tanto, la vida.

YO: Exacto.

SOY: O sea que, la vida aparenta ser eterna en tanto el corazón late, y por lo tanto, la vida es lo opuesto a la muerte, es decir, lo eterno a lo finito. Y el corazón late, sin cesar, constantemente, saltando de alegría ante la vida, buscando ser eterna.

YO: ¿Es decir que los humanos relacionamos el Amor con el Corazón porque biológicamente el corazón busca la eternidad de la vida latiendo sin cesar?

SOY: Bueno, eso es una visión un poco etimológicamente rebuscada ,y a pesar de ser ustedes animales muy pensantes, sus vidas en realidad se basan en cosas mucho más simples. Dime, ¿qué le pasa a tu corazón cuando te menciono el nombre de una persona que te ha hecho mucho daño?

YO: Siento como si por un breve segundo se detuviese, una arritmia, y se contrae el pecho.

SOY: ¿Y qué sucede si te nombro a la persona de la cual estás perdidamente enamorado?

YO: Late más fuerte… Rápido.

SOY: La emoción es vasodilatadora. Cuando tu mente identifica una idea, ésta se transmite al cerebro que procesa dicha idea con los datos disponibles en sus neuronas. El cerebro interpreta dos cosas fundamentales: sobrevivir o relajarse, es decir: dolor o placer. No hay nada más. Los pulsos eléctricos del sistema nervioso avisan al sistema endócrino que se preparen para estar atentos al dolor o al placer. Esto descarga una reacción energética que contrae las glándulas principales, accionando una reacción química que impulsa una gran cantidad de hormonas, ya sea adrenalina o endorfina, en tanto los pulsos eléctricos se disponen a dilatar o contraer las venas para: o bien retener la sangre en caso de pérdida por un daño externo y herida, o en dilatarlas para que las hormonas lleguen más rápido a todas las partes del cuerpo por el torrente sanguíneo.

YO: ¿Y eso te parece menos complejo de lo que yo dije?

SOY: Jejeje… No me refiero a lo complejo del sistema, sino a que es un pensamiento complejo. No todo el mundo sabe sánscrito ni cultura indoeuropea. Pero todo el mundo tiene un sistema nervioso y uno circulatorio. A lo que voy, es que las emociones son muy simples, y se relacionan todas a los pulsos de la circulación sanguínea y a las hormonas que recorren tu cuerpo. Por ello, cuando sentimos placer, el corazón late más rápido, para llevar mayor cantidad de endorfina y dopamina, y en ciertos casos adrenalina, a todos los órganos y músculos. Por ello, cuando uno se enamora, siente que el corazón va a explotar, y siente que puede hacer lo que sea, que no tiene límites, que esta sensación puede ser eterna… “A-mors”… “Amor”… En las lenguas sajonas, fueron mucho más precisos en lo que se siente: “placer”, “deseo”, palabra que en indoeuropeo se dice “lubhyati“, dando origen a la palabra “lufu”, “liebe”, “love”, siendo raíz de “líbido” y de “lujuria”.

YO: O sea que el amor es un pulso energético que hace reaccionar a las glándulas y dilatar las venas para segregar hormonas que producen sensaciones de placer o dolor… ¿No?

SOY: ¡Sí! ¿¡No es fantástico!?

YO: Bueno… No mucho…

SOY: ¿Por qué?

YO: Porque hace sentir que todo lo que sentimos es frívolo, es mecánico, y prácticamente sin sentido, reaccionario…

SOY: Bueno… Tú me preguntaste la relación entre el Corazón y el Amor… No el sentido de ello… Haz la pregunta correcta.

YO: ¿Qué es el Amor?

SOY: El Amor es la interpretación humana de los pulsos cósmicos. Del Latido Universal. Todo es Amor, el Universo es Amor pues surge de los latidos del Cosmos. Cuando, en el principio de todas las cosas, el Cosmos se expresó exhalando su potencial interno, el eco resonó en ondas que eternamente se replicaron al infinito. La idea, se volvió imaginación, la imaginación se volvió intenciones, las intenciones resonaron en vibraciones, y las mismas se convirtieron en energía; la energía tomó patrones, y éstos dieron lugar a la materia, la cual se manifestó en una matriz de creación. La matriz creó los tejidos de las realidades, y las realidades se transformaron a través de las vibraciones, las cuales se llamaron ritmos, y estos ritmos crearon los tiempos, que modificaron las realidades en distintas melodías, todas atravesadas por una misma armonía: el eterno pulso de la idea original. Y cuando logras verlo, sentirlo, conectarte a la magnificencia de esta verdad, todos los pulsos de tu ser se armonizan encontrando placer, pues cuando ves esta idea, todo tu cuerpo quiere sentirlo, y por ello, dilata sus venas para que la información de lo que la mente ve, pueda sentirse en las células de tu cuerpo. Se llama “Éxtasis”. Cuando los humanos dicen: Dios es Amor, deberían referirse a esto.

YO: Wow… Entonces, es como si el mismo universo tuviera un corazón, y los pulsos cósmicos son como esas reacciones neuronales de nuestros cuerpos.

SOY: Pero el Universo no posee un solo corazón, ¡sino billones y billones! Todos son como engranajes de un complejísimo reloj. Todos latiendo a la perfección, pulsando la energía del Universo a través del tiempo y el espacio.

YO: Entonces, cuando el humano habla de que siente el Amor en el Corazón, no está equivocado, está pulsando la energía del Universo.

SOY: Exacto. Pues la biología es sólo una expresión cósmica, una réplica, un eco. Para entender la idea del amor, hay que desligarlo del romance poético que las culturas humanas han depositado en él. ¿Quieres disgregarlo y desmitificarlo?

YO: Por supuesto…

SOY: El Amor puede ser visto como un concepto filosófico relacionado a la Eternidad del Universo, algo que va más allá de nosotros, una energía o esencia que nos une. Biológicamente está relacionado a la Libido, es decir, a los distintos niveles de placer generados en nuestro cuerpo al sentir los pulsos. Pero ambos son lo mismo. Mira, la trascendencia de un ser puede darse de varias maneras, pero en la materia tienes básicamente dos que se unen en un mismo concepto: la multiplicación. Puedes multiplicarte a ti mismo, como una estrella de mar o una bacteria o planta, o por otro lado puedes reproducirte. Ambos actos son dolorosos, pues implican dividirse, romper algo de mí para crear un nuevo yo. Entonces, la biología encontró una forma de solucionar el temor a la multiplicación: generando hormonas que convierten el dolor en placer. Así, hay un pulso natural en los seres vivos que les obliga internamente a buscar multiplicarse. Los vasos se dilatan, el corazón bombea más fuerte, los órganos reproductores crecen, y tus genitales de repente están relacionados a tu corazón más que nunca. Así, el Universo se asegura seguir expandiéndose, trascendiendo, multiplicándose y creando. Entonces, cuando más desarrollo cognitivo tiene una especie, lleva este impulso a la cultura, y de la cultura lo hace arte, lo convierte en romanticismo, y le llama enamorarse.

YO: ¿Cómo se explica entonces las relaciones homosexuales que no poseen un destino reproductivo?

SOY: Cuando los animales descubren la cantidad de energía que un ser posee en su interior, y lo que es capaz de generar cuando esta energía se siente, tiene dos vías: la descarga de esta energía o la utilización en un beneficio común. A lo que me refiero con esto, es que no siempre esta energía es necesaria para la multiplicación, sino que activa a su vez mecanismos energéticos que nos hacen multiplicarnos en otras dimensiones. No todo se trata de este mundo de tercera dimensión. Muchos animales utilizan la homosexualidad como un proceso natural de simbiosis energética y supervivencia, como ciertas aves y mamíferos. Otros, como los humanos, la utilizan a su vez como trascendencia y energía creativa. Para llegar a otras dimensiones, necesitas de este pulso. La energía sexual, el latido del corazón, están ligados a las esferas superiores de consciencia, pues el pulso es interdimensional. Dicho de otro modo, da igual con quién sientas este pulso, lo importante es qué haces con él, y si es para un bien orgánico y común, y no sólo como una búsqueda de satisfacer el organismo biológico.

YO: O sea que el pulso universal, el latido del corazón cósmico, se reproduce tanto horizontal como verticalmente. ¿Cómo sé si estoy usando bien este pulso o no?

SOY: Bueno, es fácil: ¿te sientes pleno o vacío? Esa es la pregunta que has de hacerte. Observa, contempla la reacción de tu cuerpo y psiquis, y lo sabrás.

YO: Pero si siento amor, es decir, si siento el “enamoramiento”, en cierta forma significa que mi energía se está expandiendo y es bueno. ¿No?

SOY: Enamorarse es el primer proceso energético y biológico de la expansión del ser. Luego viene el Estar Enamorado, que implica equilibrio. Y luego viene Sentir Amor, que implica unidad. Para luego llegar a Amar, simplemente, el cual implica libertad en ambos agentes que se habían enamorado. Y ese es el concepto que hemos romantizado. Hemos convertido un pulso básico de reproducción, en una búsqueda de trascendencia.

YO: El amor entonces es una energía. La cual no está en el corazón, sino en todo el cuerpo, en distintos niveles, denso y sutil, pero que pulsa desde el órgano cardíaco.

SOY: Claro, es el motor energético que hace funcionar la maquinaria, el reloj de la eternidad. De la expansión. Todo lo que sientes en tu vida, pasa, pues, por el corazón, y calibrar la fuente energética de tu corazón es fundamental para que haya equilibrio en lo que pulsas hacia tu propio universo.

YO: Y esto es en relación a las emociones…

SOY: No, es en relación a la mente, pues recuerda, fue una idea la que hizo que tu corazón se contrajera o se dilatara. Entonces debes tomar conciencia de cuáles son tus pensamientos e ideas sobre la realidad. Nombra a cada persona que conoces, y siente la reacción de tu sistema circulatorio, es la única manera de saber lo que realmente piensas de alguien sin prejuicios. Las ideas moldean el ritmo de tu corazón. Por ello debes limpiar tu mente de prejuicios y preconceptos para calibrarlo. No basta con sentarse a sentir mariposas y lucecitas de colores irradiando de tu corazón. Ahora que comprendes la maquinaria que genera el pulso de expansión, sabrás lo consciente que debes ser para utilizarla correctamente.

YO: Básicamente, si no soy yo el que pulsa desde la consciencia, seré impulsado desde la inconsciencia. El latido de mi corazón es el que acciona o reacciona informando al resto de mis células sobre mis ideas, mi mente, lo que percibo. Es el filtro que lleva dicho conocimiento a cada parte de mi ser.

SOY: Calibrando el impulso para convertirlo en un pulso, nos alinea al engranaje del reloj cósmico. “Tic… Tac… Tic… Tac… Es el tiempo“. Comprender esto no quita romanticismo a la emoción de sentir amor-Simplemente nos ayuda a comprender que el amor va más allá de una idea bonita, es ciencia y tecnología, es arte y arquitectura, es mecanismo y energía, es un combustible interdimensional. Genera el pulso, y te alinearás con la Mente del Universo que crea todas las realidades.

YO: Yo soy el Latido Universal…

SOY: Yo Soy el Pulso Cósmico…