SOY: ¿Qué te frustra? ¿Logras lo que te propones? ¿Buscas la perfección? ¿No te importa que salga mal?

YO: Uf… Qué palabra! Si hay algo que es constante en mi vida es la frustración, pero el hecho de que sea constantemente intermitente es porque siempre encuentro la manera más rápida de salir. Avanzo muy rápido, pero me frustro de la misma manera…

SOY: ¿Por qué crees que sucede esto?

YO: No sé, sé que es una característica muy típica de las energías capricornianas, y después de los 30 años uno vive más por su ascendente que su signo, y el mío es Capricornio. Sin embargo, siempre me ha sucedido, no sé bien por qué, es como una mala reacción química que desgasta la energía demasiado rápido…

SOY: Te diré por qué. Tu mente vive en el ensueño del futuro.

YO: Sí… Siempre pensando hacia delante.

SOY: Haces demasiados planes. ¿No es así?

YO: Justamente ayer hablaba de esto con algunas personas. Cada vez que hago un plan, necesito tener un plan B bien armado como si fuese el plan A. Pero, nunca es sólo plan A y B… A veces hay más…

SOY: ¿Cuántos?

YO: Bueno… Sólo diré que la forma en que estoy haciendo el proyecto YOSOY de 2020-2021 es el plan J.

SOY: A, B, C, D, E, F, G, H, I… J.

YO: Hay que ser precavido…

SOY: ¿Tanto?

YO: Mi mente está todo el tiempo pensando en posibilidades, como si todas existiesen en el mismo instante, voy creando y planificando redes de posibles resultados en mi cabeza, y aunque no lo comparto con todo el mundo, de cada cosa, relación, idea, arte, proyecto, de todo, en mi mente, hay diferentes opciones, de las cuales acabo eligiendo dos o tres para manifestar… Y al final resulta saliendo una de ellas, pero como las tres me parecían óptimas, luego me adapto fácilmente al cambio. Es decir, soy un cocreador nato, tengo facilidad para manifestar las cosas que me propongo, y por ello al manifestar 3 de ellas, sé que cualquiera que salga estará bien.

SOY: ¿Y si no sale ninguna de las 3?

YO: Así es como se llega al plan J.

SOY: Jajaja, qué gracioso. Pero la verdad es que el Universo es así, pues desde el inicio de todas las cosas, coexisten todas las posibilidades, y en función de las acciones, decisiones, emociones, pensamientos, intenciones, se manifiesta una u otra. O incluso se lanza a vivirlas todas igual…

YO: Realidades y Universos paralelos.

SOY: Pero hay una gran diferencia entre cómo el Universo ramifica los planes y tú, como humano.

YO: ¿Cuál?

SOY: La psiquis limitante. El Humano genera potencialidades y las diseña como planes de posibilidades. Esto se produce en la mente inteligente, es decir, la que lee entre líneas, la que interpreta e imagina. La imaginación es clave en el proceso de creación, y como la mismísima mente universal, la mente es ilimitada e infinita, a no ser que tengas una mente recubierta en cientos de patrones de creencias. Cuanto más amplia, libre, infinita es una mente, mayor cantidad de posibilidades potenciales existen. Pero luego, esa idea debe manifestarse, llevarse a cabo, plasmarse en esta realidad, y ello implica acción, energía, voluntad, fuerza, trabajo, constancia, experiencia, prueba y error. La evolución misma, por ejemplo. Hay tradiciones religiosas que creen que las cosas, los animales, las plantas y los humanos, fueron creados por Dios con el chasquido de sus dedos, moldeados con barro como una escultura de arcilla. Sin embargo, sabes que demora un poco más que eso…

YO: Hay muchos factores a tener en cuenta…

SOY: Primero la correcta intención que da lugar a las vibraciones específicas y armónicas, que permiten que las cuerdas resuenen en sintonía sinfónica. De allí, las cuerdas se enroscan creando tensión vibracional, que descarga energía; la energía vibrará cada vez más velozmente hasta crear una partícula, que empezará a buscar balance, equilibrio en la descarga de polaridades, creando átomos. Los átomos deberán unirse para ahorrar energía e intercambiarla, manifestando moléculas, que generarán elementos químicos, que formarán compuestos químicos, de los cuales surgirán estructuras inorgánicas, que en su interacción simbiótica darán lugar a estructuras orgánicas, que se irán adaptando a distintos ambientes en el proceso que llamas evolución, generando comunidades de organismos celulares, virales y bacterianos, los cuales en su interacción e intercambio conforman un cuerpo que engloba distintos organismos multicelulares llamados órganos biológicos. Y la interacción de memoria celular creará el entramado neuronal, que produce una red inteligente de registro e interpretación de información, que permite que la mente original se manifieste en la materia y actúe, viva, sienta… ¿Cuánto tiempo lleva este proceso?

YO: Uf… Mucho… Trillones de años básicamente…

SOY: Y tú te frustras cuando no te sale un dibujito…

YO: Visto así… La frustración no tiene lógica… Si la mente universal se ha tomado la eternidad para diseñar lo que hoy vemos como producto final, con el fin de poder vivir sus pensamientos, cualquier pensamiento que no surta efecto en los plazos esperados según mi ego, ya no tendrá sentido. Entonces, ¿por qué nos frustramos tanto si somos un diseño que ha esperado millones de años para aparecer? ¿No deberíamos tener la experiencia de la paciencia?

SOY: Frustración viene de la misma etimología latina que da lugar a la palabra “Fraude”. Su origen es el indoeuropeo “dhwer”, que significa Decepción, es decir, cuando no puedes obtener lo esperado (de-ceptus / de-kept: fuera de lo capturado, de lo guardado). “Fraus” o “Frus” son los modos en que se reconocía un error por engaño, algo que pensaba poder poseer, guardar en mí, y que se escapa o cae de las manos pues pensaba que sería diferente.

YO: Entonces, si entendí bien, el engaño es producido por la mente que se considera ilimitada y no considera los tiempos, ritmos, limitaciones espaciales y orgánicas del cuerpo…

SOY: En español, “engaño” proviene de “in gannire”, que significa “aullido sollozante del interior”. Es como ese quejido silencioso que confunde, que nos hace oír algo que no es. La voz en off constante que narra nuestras vidas y que a veces las decora con imaginación. Lo mismo con el concepto inglés “deception”, que se refiere, como lo dicho con anterioridad, a aquellos que no fue obtenido, guardado en el interior, es decir, algo que creía tener pero que al final fue que no. El Universo es un creador nato, un artista, dispuesto a manifestar todo, a gestar todo tipo de pensamientos. Pero, en su propio diseño, encontró herramientas que hicieron de la eternidad etérea un concepto limitado llamado “tiempo y espacio”. A mayor cantidad de aspectos, en la multiplicación y doblegamiento del tiempo y el espacio, más rígida la opción de modificarles, y manifestar algo lleva más tiempo y desgaste energético. Es así cómo un átomo se mueve como la luz, a gran velocidad, mientras que una galaxia tarda millones de años en girar sobre sí misma, incluso estando todo su ser compuesto sólo de los mismos veloces átomos y partículas de luz. La mente es como esas partículas de luz: veloz, con la habilidad de viajar a gran velocidad, ir y venir miles de veces cuando un objeto físico aún está tratando de salir con su fuerza inicial. Ahora bien, desde el punto de vista de esa partícula de luz, todo es posible, y ve cada cosa que pueda suceder. Desde el punto de vista del objeto, sólo puede ver una dirección, y está poniendo todo de sí para alcanzar dicho punto. Entonces, ¿qué pasa cuando el objeto puede percibir lo que las partículas de luz observan?

YO: Verá todo aquello de lo que es capaz, pero le parecerá que no se mueve, que no logra llegar a ello.

SOY: Cuando un ser humano empieza a volverse consciente de su ser eterno y lumínico, pasa por los procesos de la frustración. Y no me refiero a un ser consciente como alguien espiritual, sino consciente de que es capaz de hacer mucho más de lo que el entorno le condiciona. El ser inteligente se conecta con la luz de la consciencia, la gran velocidad de la imaginación y el sueño, y ve todos los planos, los diseños de la existencia de su ser. Entonces proyecta expectativas, y se proyecta a sí mismo viviendo esas circunstancias. Pero su cuerpo sigue aquí, anclado a un espacio y un tiempo, viviendo los procesos de manera lenta, orgánica… Como la mente ve el resultado, no asimila el proceso, y considera el error como una derrota.

YO: Wow… La lentitud del cuerpo y los procesos biológicos son los que dan la sensación de incapacidad a la mente ilimitada… Así la mente se frustra, se siente engañada, pensando: no puedo, me sale mal, seguramente no es lo mío… Y abandona…

SOY: La frustración es la incapacidad de estar y ser aquí y ahora, de reconocer que el cuerpo tiene que pasar por procesos de error para mejorar la experiencia. No hay evolución sin prueba y error, sin intentos. El engaño que te hace percibir la frustración no es más que tu incesante búsqueda de cumplir un propósito sin disfrutar del camino.

YO: Esto es lo que suelo decir muchas veces. Esta es la razón por la cual las personas no pueden recordar sus vidas pasadas, o su futuro, por la que no pueden saber su misión o propósito. Muchos dicen: tal vez todo sería más fácil si pudiéramos recordar nuestro propósito, así no perderíamos tiempo ni sufriríamos. Pero allí está el gran error, no se trata de cumplir el propósito, el Universo no es una empresa que busca resultados positivos en el balance de fin de año.

SOY: Así es. El Universo es un ser en desarrollo de sí mismo, en autoconocimiento, no busca ganar, obtener, tener, conseguir, cumplir, llegar, terminar… esos son conceptos de la materia, de la limitación de tu consciencia. El universo es ilimitado, y por ello no busca que cumplas tu misión o propósito, lo que busca es desarrollarse en el camino hacia el propósito. ¿Te das cuenta que el cosmos colocó delante la idea de cumplir un propósito sólo para incentivarse a realizar el camino?

YO: Vivimos nuestras vidas creyendo que lo que hay que conseguir es llegar a la meta y cumplir lo pactado, cuando lo pactado y la meta fueron lo primero en ser creado sólo para impulsar al ser a realizar el trayecto hacia el destino… No importa el destino, importa el camino…

SOY: Lo importante aquí es el proceso.

YO: Hay algo que no entiendo… Si la mente es la que se acelera y ve todas las opciones pero a la vez es la que tiene la consciencia del propósito y sólo busca vivir la experiencia, entonces ¿por qué es la que confunde al cuerpo llevándolo a la frustración por sus limitaciones?

SOY: ¿Qué te hace pensar que es la mente la que hace eso?

YO: Bueno, tú lo dijiste…

SOY: No, yo dije que es lo que la gente percibe de la mente, pues la misma se mueve muy rápido. Pongámoslo de otra manera: ¿te frustra que un pájaro pueda volar y tú no?

YO: A veces…

SOY: ¿Es culpa del pájaro que vuela que tú te sientas frustrado?

YO: No…

SOY: ¿Es culpa tuya que no puedas volar?

YO: …No…

SOY: ¿Entonces por qué sería culpa de la mente ilimitada el que tú seas limitado? ¿Por qué sería culpa de tu cuerpo limitado el que no puedas ser ilimitado?

YO: No hay culpa… Sólo hay expectativas…

SOY: Aha! Sólo hay expectativas. Pierdes más energía en la expectación de las cosas que en las cosas en sí. No puedes volar como un pájaro, pero puedes construir un avión. Con paciencia, estudio, inteligencia, prueba y error. La frustración es sólo una percepción, un preconcepto de lo esperado. Recuerda, no hay nada realmente que esperar… Todos los planes que construyes, no son para ser cumplidos, son para descubrir las capacidades que tienes de hacerlo posible.

YO: Esto quita tanto peso… Tanto, que no te das una idea…

SOY: Me doy la idea, pues yo soy la idea.

YO: jejeje… Es verdad.

SOY: Sé libre… Camina, y cada vez que te frustres, recuerda: “el propósito fue inventado sólo para que te atrevas a andar”.