YO: “Ex-duco”. La primera vez que escuché el significado de Educación fue en el bachillerato en clase de Latín. Cuando la profe Elisabeth, un personaje a quien apreciábamos mucho, dijo el significado de esta palabra tan mal usada en nuestra sociedad, y al oírlo me cambió completamente la visión que tenía de la misma.

SOY: “Ex” (hacia afuera) y “ducere” (llevar algo). La Educación es la acción de llevar lo que está dentro hacia afuera.

YO: Lo opuesto a lo que se nos vende como idea. En realidad cuando la gente habla de educación describe siempre la “Enseñanza”, que es el concepto de “señalar algo”, mostrar o apuntar lo que está afuera, señalar lo que se considera real o verdad.

SOY: ¿Has podido vivir ambas?

YO: Por suerte sí. He tenido profesores que enseñaban y profesores que educaban, y he podido experimentar ambas. Los que enseñaban nos daban todas las respuestas, y si nos equivocábamos se enfadaban o nos hacían notar que no prestábamos atención. Los que educaban, lanzaban una pregunta, y entre todos buscábamos la respuesta, y sus apuntes eran nuevas preguntas. Sólo afirmaba la respuesta cuando alguno de nosotros en el aula la habíamos dicho, y de allí desarrollaba mediante oratoria o actividades experimentales. Desde niño siempre creí que mi vocación sería la veterinaria, ya que siempre buscaba sanar animales, entenderlos. Sin embargo, cuando aparecían adultos u otros niños, lo que más gozaba era explicarles sobre los animales. Recuerdo que organizaba jornadas estilo programas de televisión o aulas donde hacía una serie de preguntas y juegos donde mis vecinos aprendieran sobre cada animal. Pero lo mismo hacía con otras cosas, como escribir o escuchar música.

SOY: Jugar a la maestra.

YO: Sí, fui descubriendo que era mi vocación desde muy pequeño. Recuerdo que mis guías me dijeron: “allí donde veas la palabra Educación encontrarás tu camino”. Y por ello siempre seguí la palabra. Sin embargo detestaba la escuela. Recuerdo lo mucho que me molestaba ir al parvulario, pero creo que lo que más me incomodaba era la gente. Esto me pasó siempre en la educación, creo que los profesores se concentraban mucho en el contenido y no lograban ver que lo que más nos cuesta es adaptarnos y convivir, por eso tenemos tantos problemas en la adolescencia y adultez, porque el tiempo de aprender a relacionarnos en armonía lo hemos perdido aprendiendo datos inútiles. Durante toda la primaria disfruté aprender, me encantaba hacer las tareas, llevar las carpetas ordenadas, al día, hacer todo lo que los profesores pedían. Cuando, a los 12 años empecé a recordar mi pasado, muchas de las cosas que antes me eran fáciles, como matemáticas, dejaron de serlo, y parecían imposibles. Me confundía entre realidades y dejé de ser el mejor alumno… Al mismo tiempo los profesores se volvieron más intensos, y más exigentes. Iba a un colegio agrotécnico, o sea que no sólo teníamos materias normales de las escuelas públicas, sino que además teníamos materias de campo. Aprender a sembrar, cosechar, granja, faenar, criar pollos, cocinar, un total de 35 materias que se esparcían por trimestres en comisiones. Desde las 7:30am hasta las 17:30 horas, estábamos en el colegio, y en invierno sólo estábamos en casa de noche. Lo detestaba, aunque era una buena escuela con buena enseñanza, y algunos a veces nos educaban. Muchos creían que “educar” significaba tener buena educación, o sea, comportarse, saber decir “buenos días”, comer bien, ser respetuoso con los mayores aunque los mismos se equivoquen, no decir malas palabras, sentarse correctamente, masticar con la boca cerrada… Creaba la idea de que educación era igual que adoctrinamiento en modales. Como si adiestrasen perros para sentarse.

SOY: Bueno… No esta lejos de la realidad.

YO: Cuando me mudé a España, el sistema era muy diferente, sólo teníamos 9 materias, parecía facilísimo, pero eso fue lo que a su vez me hizo restarle importancia. Algún profesor o profesora tenían alma de educadores, pero aún así el sistema nos forzaba a ser evaluados como productos. Recuerdo que tanto en Argentina como en España, aunque en España se notaba más, nos dividían en 3 comisiones: la de los inteligentes, la de los normales, y la de los tontos.

SOY: ¿Tontos?

YO: Bueno… Me refiero a los que menor rendimiento tenían o más problemáticos eran. Algunas clases eran compartidas, pero otras estaban divididas, así los más lentos no retrasaban a los inteligentes. Pero con el tiempo vi que esto generaba el efecto contrario. Los inteligentes no aprendían, sino que luchaban por pertenecer a esa clase y vivían un estrés constante de sentir que eran superiores. Los más lentos empeoraban su rendimiento, pues eran tratados como aquellos que no aportarían nada a la sociedad, entonces no se les exigía más que hacer algún taller que los prepare para oficios de necesidades básicas o servicio. Y los del medio éramos tratados como futuros trabajadores de un sistemas que había que nutrir desde la clase media.

SOY: La lucha de clases, de Marx…

YO: A veces lo parecía. Los dos últimos años había un examen que definía si eras apto para hacer el bachillerato o si era mejor que se hiciera un curso de preparación de un oficio específico, cerrándole oportunidades, y vaciando el Bachiller de niños molestos. Y luego, la Universidad, con su horrible examen de “Selectividad”, que seleccionaba personas hacia profesiones por sus notas y calificaciones, no por sus intereses. Y en la Universidad muchos van cayendo, sin posibilidades de seguir por los costos o las temáticas, o lo que sea. En definitiva, la Educación nunca educa, sino que enseña, separa e impulsa a la competencia.

SOY: Y aún así la elegiste.

YO: Cuando se trata de despertar al ser divino de cada uno, no hay otra forma más que la educación.

SOY: La Educación es la facultad humana de despertar sus propios potenciales para enfrentar el mundo. La Enseñanza es el acompañamiento y guía de los que poseen la experiencia para que descubras por ti mismo de lo que eres capaz.

YO: El que enseña muestra un camino, no da la respuesta… No debería al menos. Y la educación parece ser algo que sólo puede hacer uno mismo, no otro.

SOY: Ambos se integran. La Educación surge de uno mismo, y la Enseñanza acompaña dicho proceso. Como hemos hablado en el Aprendizaje, uno aprehende o aprende lo que está fuera y lo incorpora como propio devolviéndolo al mundo transformado, de una manera única y personal, lo que se llama Educación. Los Educadores eran compañeros de camino, guías y maestros que buscaban mostrarle a los aprendices diversas formas de encontrar la respuesta en su interior. La educación surge de la imitación, en que los animales muestran a sus crías cómo hacer las cosas por sí mismos. Podrás pensar que mostrar algo es enseñanza, no educación. Y sí, así es. Sin embargo, nadie resuelve el problema de la cría, lo debe hacer por ella misma. De esta forma es que los animales van mejorando sus capacidades. La educación atraviesa al reino animal, pues sus habilidades se adaptan por aprendizaje, por desarrollo de sus propias capacidades. En la enseñanza encuentran herramientas, en la educación encuentran evolución. En este desarrollo, el humano como animal, fue mejorando sus habilidades mediante la comunicación. La palabra empezó a transmitir conocimientos de una manera más detallada y específica. Las madres y los padres enseñan a los hijos. La manada y la familia transmiten conocimientos en el compartir, y surgen los guías, chamanes, líderes de los que ya hemos hablado, como inspiración para varios. Los chamanes se vuelven sacerdotes, quienes transmitirán a los aprendices el conocimiento universal mediante el concepto de “Caminos”. En distintas zonas del planeta, las culturas diseñaron sus propios Caminos Iniciáticos, que desarrollaron las religiones y culturas ancestrales. Los caminos se dividieron entre aquellos que labraban la tierra, aquellos que buscaban entender el cielo y aquellos al servicio del grupo, en defensa y caza. Las tres iniciaciones ordenaron a los grupos, como tus comisiones en el colegio.

YO: Se hizo siempre…

SOY: Porque el humano no busca el conocimiento, busca la practicidad. Praxis es ponerse a la acción, y tomando en cuenta que un humano tiene tres necesidades básicas: comer, reproducirse y dormir, entenderás que la intención primordial es cubrirlas, el resto es aparte. Las escuelas sacerdotales eran elegidas por unos pocos, pues, daban riqueza, pero no eran prácticas. Las otras dos eran fundamentales.

YO: Y por qué entonces siempre el poder religioso estuvo por encima de todos, controlando la educación.

SOY: Por la “Jerarquía”. Recuerda, que desde que el humano comprendió que la vida proviene de los aspectos invisibles del universo, la existencia material sólo obtiene poder gracias a lo sagrado espiritual. Por ello, entendían el cielo y lo que estaba por venir, y aconsejaban a los guerreros y agricultores. Los líderes, pues, consultaban siempre a aquellos que entendían los cielos, y se empezó a considerar que el poder de un líder provenía sólo del poder de Dios, del Cosmos, el poder Divino. “Jeros” significa “sagrado”, como el jeroglífico (escritura sagrada), así, el poder de lo sagrado es la Jerarquía. Los únicos capaces de otorgar divinidad, de elegir al rey o reina, eran los sacerdotes, y sin ellos, la persona jamás sería elegida ante los ojos de Dios. Por ello los Caminos Iniciáticos del espíritu eran intocables, y se creó la costumbre, cultura, tradición, de que todo agente social debe tener la aceptación de lo divino para poder ejercer su “praxis”.

YO: Entiendo…

SOY: Y para asegurarse de que esto fuera así, los sacerdotes, los consejeros, se dedicaron a la Educación. Y en la búsqueda de obtener el poder, moldearon la Educación para convertirla sólo en enseñanza espiritual religiosa. Hasta que, nuevamente, en las islas griegas del Egeo, algunos decidieron salirse de este sistema, y en lugar de ser religiosos, pasaron a ser excelentes cuestionadores, buscando respuestas mediante la duda eterna.

YO: Los filósofos.

SOY: Amantes de la Sabiduría. Dejaron las tradiciones religiosas para dedicarse al cuestionamiento de las cosas. En Grecia, la enseñanza dejó de ser religiosa y pasó a manos de los filósofos y militares. Los últimos se relacionaban por oficio, deber, eran elegidos para defender y servir a los demás, y su enseñanza se llevaba a cabo en el concepto de “colegio”, de “co-“ (junto) y “legós” (elección). Pero los primeros, compartían sus conocimientos en espacios abiertos y públicos llamados Ágoras o Aulas, patios donde las personas se dirigían en sus tiempos libres a oír a los filósofos, a responder sus preguntas existenciales luego de cumplir sus tareas políticas (cívicas). Este momento de ocio y relajación era llamado “skholé” (ocio, recreo).

YO: ¿Escuela significa ocio y diversión?

SOY: Contrario a hoy, pero lógico. En aquel tiempo no había videojuegos, no había Netflix, internet ni cafés, y el punto de encuentro era sentarse en un patio a hablar de la vida. La escuela surge como un momento de relajación para compartir. Tras la aceptación de la religión cristiana por parte del Emperador Constantino en el Imperio Romano con sede en la actual Estambul, la escuela deja de ser bien vista pues eran cuna de librepensadores no religiosos. Así, las mismas se prohíben, y los colegios pasan a formar parte de la Iglesia. La enseñanza en manos de la religión, en latín. No será hasta el Renacimiento, en el siglo XVI, que se empiece a traer las ideas de Grecia y Roma antiguas, y con ello, el librepensamiento de la filosofía y las escuelas. Esto da origen al pensamiento Científico Cartesiano, a la experimentación, la búsqueda de la información mediante la duda, y ya no la fe. Desde el colonialismo, la iglesia impuso su visión colegial a nivel planetario, adornando la educación en un concepto militarizado y eclesiástico en manos del Papa, los Jesuitas y Franciscanos. Pero a partir de las Revoluciones industriales y sociales del siglo XVIII, los librepensadores laicos vieron la oportunidad de crear repúblicas donde las personas pudieran volver a aprender de la duda, retomando la educación, creando las Escuelas otra vez, pero adornadas del sistema tradicional colegial.

YO: Y con la Revolución Industrial y la visión capitalista surgida en Europa, en lugar de crear ágoras de personas libres, se crearon fábricas de personas que compiten, evaluando sus conocimientos en números y letras de calidad de producto.

SOY: Así es como se acaba por diseñar la escuela y educación actual. En la que sientes que compites por una evaluación, en donde ya no buscas ocio y educación, sino que te ves forzado a la enseñanza de conceptos impuestos por un sistema. Recuerda que en la búsqueda de hacer a las personas libres del colegio religioso, los padres del Iluminismo crearon la enciclopedia y educación laica obligatoria con el fin de eliminar la ignorancia y construir un pueblo libre de espíritu… Pero…

SOY: Pero la clave de la educación es la duda, no se puede forzar a alguien a aprender la respuesta de aquello cuya pregunta aún no conoce.

YO: ¿Qué podemos hacer para que la educación sea diferente?

SOY: En primer lugar se debe recordar que estamos en el siglo XXI, no en el XVIII. La Educación, junto a la Política y la Religión, son los únicos sistemas que no se han modificado a nivel global. Y esto pasa debido a que los tres conforman uno solo. La Religión da poder a la creencia Política, y la Política controla a los pueblos mediante la Educación. Un pueblo libre deja de tener políticos representantes, y deja de tener religión para conectarse al espíritu. Nadie en el sistema querrá transformar la Educación, por ello hay dos caminos.

YO: ¿Cuáles?

SOY: Desde arriba o desde abajo. Desde abajo implica una revolución educativa, en que las poblaciones sean las que exijan un cambio específico de todo el sistema, sólo que no saben cuál es ese cambio. Todos exigen mejor educación, pero no saben a qué se refieren. Piensan mejores evaluaciones, mejores contenidos, mayor preparación o acceso a la educación, cuando ese no es el problema, sino la esencia de que no se educa en la duda liberadora, pues se enseña en la respuesta preconcebida. Una revolución educativa es replantearse qué tipo de humanidad buscamos gestar, no qué tipo de ciudadanos queremos producir. Y por arriba, es un cambio político, que transforme la ideología de poder representativo para devolver el poder al pueblo de la toma de decisiones directas mediante la guía adecuada.

YO: Es un gran tema a tratar que daría para mucho…

SOY: Y lo haremos. A su debido tiempo. Pues la Educación es la voz de un pueblo, y hoy la palabra está distorsionada. En el tiempo de las redes, la educación debe ser en Red, es fundamental replantear todo lo que conocéis como educación, pues habéis dejado el Holoceno, ya no sois la humanidad que fuisteis por 12000 años… Este es un nuevo tiempo, que dará una nueva palabra, la Educación del niño nuevo será diferente, pues los nuevos niños sabrán desde el nacer.

YO: Recordarán…

SOY: Y para que recuerden, deben aprender en Red. La duda es el mayor regalo para la educación del Ser. Si eres humano de certezas, jamás evolucionarás.

YO: ¿Cuál es la primera pregunta de la que debo dudar para despertar toda la nueva educación?

SOY: ¿Yo Soy?