YO: Hoy desperté con lágrimas en mis ojos. Aquello que expliqué ayer se volvió real en mí. Soñé con lo que mi subconsciente parece anhelar, lo que mi alma aclama. Era un sitio hermoso, un valle como nunca había visto antes, donde todo lo que me gusta podía verse. Valles, montañas, bosques, río y arroyos desembocando en un mar brillante a lo lejos; y en un extenso prado, una casa, tan bella que daba calidez a mi corazón. Llegué volando, pero con mi propio cuerpo, aleteando con mis brazos, como si fuera un pájaro, esquivando ciertas zonas donde podían verse osos. Al llegar, dentro me sentí en casa, por primera vez. Miré desde el pórtico, y respiré hondo, suspirando, sabiendo que ese era mi sitio. Cuando fui a la habitación para dormir, alguien estaba allí durmiendo en la cama. Le vi, y aunque no le conozco en mi vida, supe que era el amor de mi vida. Me sentí un poco distante, pues mi consciencia le veía como un extraño. Pero me acosté igual. Me abrazó por detrás preguntándome cómo me había ido. Y en ese instante me sentí en mi hogar. Desayunamos juntos, mientras él me contaba anécdotas y ambos nos reíamos. Por un instante sentí la perfección, sentí que todo lo que había buscado en mi vida se resumía en aquella imagen. Como comentarista podría decir que todo era demasiado taurino para mi gusto, lo opuesto a mi vida idílica. Y entonces, mi subconsciente contratacó. Por encima de las colinas, apareció un comando como del FBI o algo así, y con armas, como flechas, irrumpieron en este paraíso, disparando para aprisionarnos, con tanta eficacia que en su primer disparo atravesaron el pecho de mi compañero, matándolo frente a mí. De repente, entré en shock, no podía moverme, arrinconado contra la pared, temblando. Empezaron a destruir la casa, y entonces decidí correr. Me escapé por el arroyo, y atravesé el bosque volando, directo hacia los osos, para que me protejan de aquel escuadrón que avanzaba. Pasé días tratando de sobrevivir, pero perdí el sentido de la vida. Todo lo que siempre había buscado estaba allí, y se había destruido, lo habían eliminado, no había vuelta atrás. Entonces tampoco había sentido intentar sobrevivir. Por lo tanto me entregué, caminando sin sentido frente a la prisión. Me vistieron de una manera extraña y solemne, y me encerraron en una celda sin ventanas, muy pequeña, sin cama ni baño. Allí me senté, mientras veía cómo metían a más personas en el mismo espacio. Me quedé allí en la sombra de un rincón, y sentí la angustia más fuerte que había experimentado en un sueño… Y lloré, no podía dejar de llorar, y en el mismo llanto desperté, con mis ojos y mejillas mojadas, aquí y ahora…

SOY: ¿Cuál crees que fue el mensaje?

YO: No lo sé bien… Me di cuenta de que mi alma espera algo muy diferente a lo que mi cuerpo y mi espíritu experimentan y anhelan. Que esa es mi constante lucha interior, el reconocerme libre, sin un punto fijo, y a la vez, lo que me hace sentir en calma es la idea de vivir una vida que se me escapa, que no es para mí hoy.

SOY: ¿Por qué crees que no es para ti?

YO: Mi subconsciente me recuerda que ha venido a enfrentarse a una lucha por la libertad. Que la mayoría de las personas lo pierden todo, que se sienten aprisionadas en un mundo de limitaciones, y que yo me siento igual. Nuestros sueños son coartados por fuerzas que impiden que las cosas sucedan como las esperamos. Tal vez mi sueño haya sido demasiado exagerado para poder mostrarme esta dualidad… Siento que si no veo esa contracara de la libertad y armonía, no buscaría encontrar las formas de liberarnos a todos de esa prisión en la que nosotros mismos nos hemos metido… Pues fui yo quien me entregué.

SOY: Tu subconsciente te mostró hoy las dos caras de ti mismo. Tu compañero no es más que aquella otra parte de ti que rechazas, la que desea vivir una vida tranquila, normal, sin propósito más que gozar. Es aquella parte cariñosa, familiar, amiga, que te abraza tras tus viajes, que te espera en ese sitio de belleza, en tu interior. Es tu propio paraíso donde encuentras el verdadero amor de compartir contigo mismo. Y es tu propia mente la que busca siempre destruir esa idea, pues la perfección no posee acción, evolución, movimiento. Tu ser necesita correr, busca crear siempre un conflicto con el objetivo de sentirse vivo, sentirse útil. La aventura nutre esa parte de ti que huye constantemente de su eje, y que se entrega a la prisión de la estructura, limitándose a acciones que te encierran en tu propia mente.

YO: ¿Cómo salgo de ahí?

SOY: La pregunta no es cómo. La pregunta es si realmente quieres salir de allí. Pues la cárcel está en tu mente, y el anhelo está en tu corazón.

YO: Cómo diferencio el encontrar la libertad del dejar mi propósito? Porque, seamos sinceros, toda la vida he diseñado lo que estoy haciendo ahora, y sé que desde el día de hoy queda un año más de este propósito que me mantiene ligado.

SOY: Has tomado tu propósito como una prisión, cuando el mismo es tu libertad. Sólo debes recordar que tú eres la llave, y que la puerta a la libertad sólo se encuentra hacia el interior. El exterior es sólo una proyección de lo que vives dentro. Tus fracasos emocionales no son más que tu propio fracaso al amarte a ti mismo. El abandono de uno mismo por estar al servicio de los demás. Acuario te provoca esta taquicardia que hace que la flecha del enemigo que has inventado atraviese el corazón de tu amante. ¿Te das cuenta? Eres tú mismo dándote un mensaje desde el más allá, susurrando que todo esto sólo vive en tu mente, que la libertad no implica dejar nada, que la libertad no es abandono. La libertad es soltar el peso de lo que haces y eres, la responsabilidad no es sinónimo de cargar un peso, es sinónimo de saber responder. Ahora respóndeme: ¿Eres capaz de ser libre?

YO: Me cuesta escribirlo… Pero sí, sé que tengo la capacidad.

SOY: Y esa libertad será cuestionada una y otra vez. Mientras estés en la Tierra, al menos unas 3 veces al año.

YO: ¿Cómo?

SOY: En las Retrogradaciones de Mercurio.

YO: “Mercurio Retrógrado”, se ha convertido en un mantra para explicar los problemas que tenemos…

SOY: Mercurio es un pequeño planeta rocoso, el más cercano al Sol. Su superficie es tan caliente que nada podría vivir allí. Debido a su tamaño y cercanía a la estrella de nuestro sistema, su órbita es muy rápida, dando unas 3 a 4 vueltas al Sol en el tiempo que la Tierra tarda en dar una sola, es decir que su año es de 88 días. Dentro de este periodo, hay un momento en que el planeta parece avanzar en la misma dirección que la Tierra, pero mientras la Tierra sigue avanzando en su órbita anual, Mercurio ya está girando para cerrar su año pasando por detrás del Sol, dando la sensación desde nuestro punto de vista de que el planeta está caminando hacia atrás, que da pasos volviendo a donde vino (retro= volver / gradus= paso, escalón). Todos los planetas hacen esto, pero Mercurio es el más veloz.

YO: ¿Y qué significa esto?

SOY: Para el planeta nada. Pero para nuestra forma de ver el mundo, significa que todo lo que este planeta significa para nosotros vuelve para atrás, y por lo tanto retrocede, se vuelve opuesto a su propósito, despertando los aspectos negativos de este ser.

YO: Por eso si Mercurio es el planeta de la Comunicación, cuando retrograde fallarán todas las comunicaciones y no nos entenderemos…

SOY: Así es.

YO: Y… ¿Qué tiene que ver esto con mi sueño?

SOY: Que has vivido exactamente las dos caras de lo que significa para ti la libertad. Por un lado sentirte libre, por el otro luchar por tu libertad. La retrogradación es un proceso natural en todo ciclo, círculo, órbita, en cada proceso hay un momento de retrogradación antes de volver a avanzar, y este proceso es tan negativo y trágico que se vuelve extremadamente positivo.

YO: ¿Cómo sería eso?

SOY: Pues la retrogradación equivale a ir atrás, al pasado, a hacer una revisión de todas las cosas, a rever las situaciones, emociones, creencias, apegos, expectativas, pensamientos, todo. Es un momento de caída, de crisis, de conflicto, que va en contra del propósito, y sin embargo es lo que te hace replantear las formas, es lo que te recuerda que debes revisar todo para poder avanzar en una espiral sin que se convierta en una línea recta sin sentido. Pues recuerda, que lo que se mueve en línea recta pierde toda su fuerza inercial, y lo que se mueve en círculos, elipses y espirales, recupera mayor fuerza en cada giro… En cada vuelta de la esquina…

YO: Oh, entiendo… Tiene lógica. Por eso es en las crisis donde más entendemos y crecemos…

SOY: Y Mercurio es el maestro en hacernos practicar esto 3 veces al año. Una para nuestro cuerpo, otra para nuestra alma y otra para el espíritu. Mercurio es, pues, el Mensajero que trae la consciencia del Sol y nos toma examen en cada una de sus vueltas.

YO: Se oyen sus palabras en el viento, dejando sus mensajes a todo aquel que quiera oírlas. Como un ave, surca los cielos, como una flecha. Cerca del Sol, se convierte en su portavoz, comunicando sus verdades… Pero, ¿por qué este planeta porta este concepto y nombre?

SOY: Mercurio es el planeta que más rápido gira alrededor del Sol, y es el planeta que parece salir del sol y volver a él con mayor agilidad. Para los antiguos indoeuropeos y pueblos de medio Oriente, esta luz en el cielo era “Nabu”, el mensajero, escriba del dios Marduk. Todas las culturas nombraron a este mundo, a esta estrella errante, como el mensajero del Dios Sol por su destreza para moverse llevando sus mensajes y volviendo a él con las respuestas. Para los humanos, su velocidad es la que hizo que tomara el nombre de todos aquellos que tenían la destreza de ser mensajeros o mercaderes. Viajantes que vendían y compraban, que llevaban las noticias de un pueblo a otro. En los tiempos antiguos, los mensajeros solían ser los vendedores ambulantes, mercaderes que vendían sus productos en los mercados, donde la gente se enteraba de todas las noticias del reino o el imperio. Allí la gente conversaba con los comerciantes y difundían lo que sucedía en todo el territorio. Por ello, Los romanos le llamaban a este dios como “el Mercader”, del latín “merx, mercis” (comerciante), que con la denominación etrusca para un sujeto (-ius, -rius) acabó por conocerse como “Mercurius”.

YO: O sea que el nombre del dios es más una descripción.

SOY: Igual que el dios griego Hermes, su igual. Hermes es como los griegos conocían a Mercurio, a Nabu, proveniente de la palabra griega “hérma”, que significa “mojón”, un cúmulo de piedras que indican un camino. Así, los mojones indicaban por dónde ir a los mercaderes y mensajeros, con lo cual el “hérmés” era el espíritu o protector de los mensajeros y caminantes.

YO: El dios Hermes es Toth para los egipcios, Djahut para los antiguos atlantes, no un dios sino un sumo sacerdote…

SOY: Djahut era un atlante, sí, maestro, arquitecto, médico, matemático, astrónomo, un sabio que resumió el Universo en pocos patrones, tales como la geometría y las leyes universales (que ya hemos visto en otros meses anteriores). Debido a que fue el maestro de la escritura, su símbolo pasó a ser emblema de todos los escribas y mensajeros, aquellos que tenían la sabiduría de aconsejar a los mismísimos dioses. Por ello, a este planeta se le colocaron los atributos de estos sabios de la Tierra, haciendo ver que cuando este planeta realizaba sus veloces ciclos nos traía con él sus mensajes de transformación y revisión constante.

YO: Así es el planeta Mensajero, el planeta de la Sabiduría.

SOY: Es el planeta que trae preguntas y respuestas, que te hace descubrir las verdades del cosmos y luego las cuestiona. Su presencia caminando en su misma dirección te hará descubrir la importancia del aprender, del saber, de comunicarte, de encontrar la verdad, de estudiar, de leer y escribir, de desarrollarte, de diseñar, construir, plasmar mediante la interacción, es el planeta de la tecnología, de la innovación constante, volando veloz por los aires como Acuario. Pero cuando va en contra de tu dirección, será quien te haga dudar de todo lo que sabes, dices, diseñas, lees, escribes, aprendes, es quien romperá lo construido y desarticulará la tecnología, impidiéndote innovar sin antes revisar lo que has hecho hasta ahora.

YO: Y esta revisión nos afectará a cada uno de una manera diferente, pero poniéndonos en avance 3 veces al año y en retroceso 3 veces más.

SOY: Seis momentos. Vuestro año humano se dividirá en los 6 aspectos de Mercurio. Una trinidad interna y una trinidad externa. La Trinidad Externa te llevará a manifestar mediante la Forma, el Sonido y la Luz. Mientras que la Trinidad Interna te llevará a revisar tu Sabiduría, tu Amor y tu Voluntad.

YO: Esto es lo que nos habían dicho hace un tiempo, ¿verdad?, La preparación…

SOY: Así es. Nuestra cita de primera conexión planetaria será este Agosto 22, 2021. Así que, desde hoy, cada uno de los meses restantes, deberemos alinear especialmente uno de estos atributos cada día 22.

YO: 22 de Febrero la Sabiduría. 22 de Marzo el Amor. 22 de Abril la Voluntad. 22 de Mayo la Forma. 22 de Junio el Sonido. 22 de Julio la Luz…

SOY: Y es así que Mercurio nos ha dado su Tarea: Construir el Gran Merkabah de todos aquellos que están en la Red. Así es que, hoy comienza el primer examen: revisar nuestra Sabiduría.

YO: ¿Cómo lo haremos?

SOY: Simplemente permítete escuchar el mensaje… Mercurio ha dejado de retrogradar, y hoy vuelve con todas sus fuerzas. Deja que el mensaje llegue a ti, y desde hoy hasta el 22 de Marzo, la Sabiduría deberá ser replanteada paso a paso.

YO: Soy el Mensajero y el Mensaje. Todos los seres que soy hablan a través de mí.

SOY: El Mensaje de los Dioses vive en ti. La forma de oírles es cantando tu canción, pronunciando tus palabras. Dilo, y sus voces sonarán en ti.

YO: …Yo Soy…