YO: Hoy tengo demasiado sueño…

SOY: Mejor… Porque para ingresar a la Quinta Dimensión, necesitarás sueño. Pues a partir de aquí, las cosas se vuelven un tanto más extrañas.

YO: ¿Cuán extrañas?

SOY: Lo suficiente como para saber que la lógica no podrá ayudarte. Aunque lo intentaremos. La 5D es el umbral hacia lo extraño, lo incomprensible; es la que abre las puertas a las dimensiones más sutiles y psicodélicas. ¿Lo recuerdas?

YO: Oh, sí… Lo recuerdo. Cuando era pequeño pude sentir la Quinta Dimensión, me conectó a parte de lo que soy hoy, me abrió a un mundo de posibilidades infinito… Pero con el tiempo, se fue apagando. Mis guías me aconsejaron humanizarme, de otro modo no podría nunca comunicar, ni cumplir mi rol de humano. Así fui haciendo eso, me fui humanizando; pero eso me alejó de la 5D, atrayéndome cada vez más a la percepción de la 3D. Descubrí que me gustaba, y no veía el vivir en la 3D como una desgracia, sino como algo genial, una aventura. Pero en el mundo espiritual, ligado al ideario de la 5D, parecía ser menospreciado el hecho de que estuviera tanto en la 3D. He oído gente que me decía: “te has desconectado, no lo estás haciendo bien, Matías perdió la conexión, ya no es lo que era…” Veía ahí un juicio demasiado fácil, sin comprender que era parte de mi proceso para hacer lo que hoy hago. Como quien juzga al que sube la montaña por subir y no estar ya en la cima. Y sin embargo, cuando debí conectarme de nuevo, se me hacía difícil, y creo que era porque había empezado a ver la conexión casi como un clasismo. Ver “quién está más conectado que quién”, “quién escucha a los maestros y avatares de la 5D y quién no”, como si alguien en la Tercera tuviera la capacidad de juzgar cómo es la conexión de la Quinta. Entonces, en el momento de volver a conectarme, me negué. Me sentí evaluado, juzgado, e interpreté que si estar o no conectado era casi como pertenecer a un “Club”, prefería no hacerlo y seguir disfrutando de la materia. Pero este berrinche humano que tuve, fue acallado por uno de mis guías, quien me dijo: “La conexión es YA”. Pero me había humanizado tanto, que una simple meditación no lograría el efecto esperado.

SOY: Entonces…

YO: Ayahuasca. Siempre me negué, no quería hacerlo, temía perder el control sobre mí mismo, sobre lo que soy. Temía que todos mis portales se abrieran y la sesión terminase en un exorcismo, cosa que ya había pasado alguna vez. Me negué, rotundamente, a ingerir cualquier cosa ajena a mí que alterase mi estado de percepción. Pero un día, estando en Mendoza, Argentina, perdí el norte. Normalmente, siempre estoy conectado a la materia, sabiendo dónde están los puntos cardinales, como un pájaro. Pero aquella vez me perdí, no sabía dónde estaba, y me quedé en casa de unos amigos, esperando… Pero el eje no llegaría tan fácil otra vez. Entonces entendí, mi eje geográfico es Chile, así que decidí viajar allí, y prepararme. La noche en que llegué, me robaron todo. Ahí entendí que debía comenzar de 0. Entonces hice Ayahuasca.

SOY: ¿Y cómo fue? 

YO: Como un sueño, pero mucho más real. Fue como volver a casa. No sentí nada de aquello que suelen decir, malestar, vómitos, nada. Hablé con la planta antes de ingerirla, y le dije: “estoy aquí para volver a mí, desde las raíces de la Tierra, confío, y no pondré ningún límite, te permitiré ingresar hasta la última de mis células. Muéstrame todo”. Entonces, la planta me dijo: “Hay dos formas de hacer este camino, mediante la purga y la sanación, o mediante la expansión y reconexión”. El primero implicaba revolver mi cuerpo, el segundo implicaba abrirlo. Opté por el segundo. Entonces inmediatamente dejé de sentir el cuerpo físico desde el ombligo hacia los pies, y empecé a expandirme. Atravesé la historia de cada reino, mineral, vegetal y animal. Vi todas las opciones, me di cuenta que estaba viviendo la Cuarta Dimensión. Y en un momento le dije: “esto no soy yo”. Y todo se desvaneció. Y la “Abuelita” dijo: “Tal vez este seas tú”. Entonces me mostró el vacío, y una pequeña luz roja que como una especie de chispa se encendía y apagaba. Comencé a correr detrás de ella, buscándola, hasta que logré tomarla entre las yemas de dos de mis dedos. Y cuando la acerqué a mis ojos, vi su belleza. Era un rubí, rojo, radiante, con forma de octaedro. El mismo se replicaba por millones a mi alrededor, y pude notar cómo cada uno sostenía una realidad. Si giraba esta gema preciosa, todos los demás giraban mostrándome una galaxia, y si lo torcía en otra dirección, veía un ADN.

SOY: El Macrocosmos y el Microcosmos.

YO: En medio del vacío… Era Todo, y era Nada. Pero sobre todo me di cuenta de algo.

SOY: ¿De qué?

YO: Que yo no era ni lo uno ni lo otro. Yo no era ni la galaxia, ni el ADN, no era lo macro ni lo micro, no era ni el tiempo ni el espacio.

SOY: ¿Qué eras?

YO: Era la lógica que había entre ellos… Era la conexión misma. Me di cuenta que todo me hablaba de que necesitaba volver a conectarme. Me sentía maltratado, como si fuera un objeto y tuviera un enchufe que debía ser conectado a una corriente externa, para poder encender mi lámpara y tener luz. Pero cuando vi esto, lo recordé. Volver a tener conexión, no significa que soy un objeto sin luz y la misma me es entregada de una Fuente externa, sino que yo mismo soy la Conectividad, tengo en mí la batería del positivo y negativo… Soy la lógica de interconexión. Es decir, sin mí lo demás no existe…

SOY: Una neurona sola no es nada. Dos neuronas separadas no son nada. Dos neuronas conectadas, son un dato, que guía a la creación de un pensamiento. Muchas neuronas conectadas son una idea, que llevan a la acción. El Espacio es el extremo del Macro Cosmos, mientras que el Tiempo es el extremo del Microcosmos. Ambos son uno, pero no tienen lógica sin conectividad. Y es aquí donde nace la percepción de la Quinta Dimensión.

YO: ¿Cómo se entiende la 5D? Porque creo que nosotros tenemos una imagen distorsionada…

SOY: Cuéntame sobre ella.

YO: Bueno, cuando pienso en esta dimensión, me imagino el Cielo Eterno, una especie de sitio divino, donde se encuentran los maestros, los guías, los ángeles mayores, un sitio de ciudades de luz, de cristal, donde suena una música tenue y sagrada, un lugar de ensueños, idílico. 

SOY: No estás errado, si comprendes que la 5D es la proyección lumínica y conexa de la 3D. Es decir, que si en la 5D todo se trata de la interconectividad que da lógica a los aspectos de la creación, entonces es natural que veas a los seres que la habitan como maestros o guías, pues saben muy bien las cosas que suceden y por qué suceden. En la Tercera, las cosas pasan, es decir, los objetos se manifiestan. En la Cuarta, pasan cosas, es decir que se ven los procesos que los objetos atraviesan. En la Quinta las cosas pasan por algo, es decir, que el tiempo y el espacio cobran lógica y entendimiento, se integran en consciencia.

YO: ¿Cómo se ve en realidad la 5D?

SOY: ¿Te acuerdas del Teseracto?  Pues vamos a complejizar su imagen. Toma un cubo y tendrás la 3D, proyecta sus vértices en cualquier dirección creando otro cubo extendido del primero, y tendrás la 4D. Ahora, toma estos ambos cubos, y proyéctalos nuevamente desde cada uno de sus vértices, generando la apariencia de 4 cubos más, y tendrás la 5D.

YO: O sea que la 5D sería como una especie de extensión de las otras dos.

SOY: Es el observador de lo observado. Si este Cubo vive en la 3D y atraviesa un proceso en la 4D, esto significa que la completa experimentación del universo sucede entre estas dos dimensiones. La primera dimensión y la segunda son partes fundamentales de la tercera. Las 3 componen la realidad que vives. La cuarta permite a la 3D transformarse sobre sí misma en sus distintas potencialidades. Y la 5D es la que le dirá cómo y por qué.

YO: Lo hace porque observa más puntos de vista…

SOY: Puede estar en todos los tiempos y todos los espacios de un ser u objeto, puede contemplar todas sus potencialidades, y entender la lógica de sus movimientos, los resultados de sus actos. En el aspecto de la Física, la 5D es la que sostiene el Espacio Sideral, aquello que llaman Materia Oscura.

YO: Que sería todo aquello que contiene a los planetas y estrellas y que parece ser un vacío, y que aún así sufre alteraciones por la gravedad…

SOY: Así es. Esta materia que no puede tocarse ni comprenderse según las leyes de la física, existe en la dimensión que sostiene los fundamentos de la física. En cierta forma, la 5D es el espejo de la gravedad.

YO: ¿Cómo?

SOY: Refleja al Tiempo y el Espacio. Para ello necesitamos entender la Gravedad. Desde Isaac Newton y su manzana, podríamos comprender que la gravedad es una de las fuerzas fundamentales que influyen en la aceleración de masas, en que los objetos se atraen entre sí. A nivel macrocósmico, es lo que hace que los objetos que levitan cerca de un planeta sean atraídos hacia él acelerando su velocidad al acercarse. Esto si contemplamos al espacio como algo vacío. Y no lo es, al menos en otras dimensiones. Ahora, para lograr comprender esto, debes diferenciar Objeto de Espacio. El Espacio es un factor de medida de distancia en el cual un objeto se desarrolla o se mueve. Un coche al viajar se desliza por un espacio. El Tiempo es el otro factor de medida por el cual un objeto se mueve. Así tenemos dos vectores conectados en un ángulo de 90 grados, con la forma de una L, que describen Tiempo (X) y Espacio (Y), y un tercer vector, que se moverá en diagonal a través de la medida de tiempo-espacio. ¿Me sigues?

YO: Te sigo…

SOY: Como verás, Espacio no es igual a Materia, sino que es igual a las distancias por las que se mueve la misma. El Universo es una constante de Tiempo y Espacio, que al colapsar entre sí, generan Materia, el tercer factor. El peso de esta materia, ocupa un lugar en la constante tiempo-espacio, lo que hace que la constante se curve. Peso en latín se dice “gravita”, por lo tanto la cualidad de peso de un objeto se conoce como “Gravedad”. Imagina que tienes una cama con un colchón muy suave, y pones sobre ella una pelota de Tenis, luego una pelota de Fútbol, y luego una pelota de Bolos. Verás que la superficie del colchón se curvará hacia el centro del peso, y cuanto más pesado sea, las otras pelotas a su alrededor tenderán a caer hacia la mayor.

YO: Wow… Entiendo… O sea que es como si todo el espacio fuese una cama llena de pelotas una más pesadas que otras, y las menos pesadas van cayendo en forma de espiral hacia el centro, creando órbitas…

SOY: La Gravedad, pues, es el peso que un objeto ejerce sobre la constante espacio-tiempo. Pero como sabrás, en el espacio no existe arriba o abajo, no hay norte ni sur, por lo que este colchón que describimos, está en todas direcciones, y el peso es equivalente en cualquiera de estas direcciones. Por ello, funciona como un espejo. Reflejos de la gravedad en cada dirección posible. La 5D sostiene el Tiempo y el Espacio. La 5D es la materia oscura que contiene la gravedad pujante como reflejos de sí misma en cada dirección, como el cubo de la imagen que has elegido, una misma realidad que impulsa su cuerpo en todas las direcciones a la vez.

YO: Qué lejos me encuentro ahora de pensar en Ángeles o Maestros, jeje…

SOY: Bueno, no tanto. Hasta ahora describimos esto con un cubo porque es visualmente más fácil. Y comprenderlo mediante el peso de la gravedad de una estrella es el siguiente paso de “fácil”. Pero esto es algo que se replica a cada partícula de la materia, cada objeto que ocupa un lugar. Como tú por ejemplo. En tanto tu cuerpo de 3D vive estas tres direcciones, tu cuerpo de 4D está experimentando todos tus tiempos posibles desde que existes como individuo hasta que desaparezcas como individuo. Y en ese mismo instante, la 5D se refleja conectando los datos de tu aquí y ahora con toda tu historia, viéndote desde cada punto de tu gravedad, conectando cada aspecto de tu tiempo y tu espacio con el sujeto que eres. Así, puedes interpretar que al ser humano y tener cerebro con dos hemisferios y dos ojos, en la 4D se proyectará todo lo que viste y pensaste, ves y piensas, verás y pensarás. Pero en la 5D, se abren los ojos del observador, en que tus ojos del tiempo se multiplican para observar su historia, y tu cerebro crea sinapsis e ideas que dan lógica a toda tu eternidad. De igual manera que ven todos tus espacios y piensan en todas tus opciones… Y así es como los humanos se sienten observados, guiados y enseñados por seres de 5D.

YO: O sea, soy yo mismo, multiplicado en reflejos que interconectan mis opciones de tiempo y espacio. Yo mismo soy mis guías y maestros…

SOY: Y eso no significa que tus guías y maestros no existan y tengan su propia vida como tú la tienes aquí. Son seres con sus propios nombres, pero que en sus dimensiones no son relevantes. Eres tú quien necesita llamarles norte y sur, arriba y abajo, tú necesitas nombres mensurables en el espacio. En la quinta dimensión, tú eres sus nombres, las cuerdas que vibran los datos a través de los tiempos y los espacios.

YO: Existen por mí, y yo existo por ellos… Yo soy la materialización de aquellos que me observan desde todos los puntos de vista, desde la Consciencia plena de quien soy…

SOY: Por ello pueden guiarte, enseñarte, pues ven por dónde vas, conocen todo de ti, pues son tú, en otro nivel… Aquí las ciudades también se proyectan en opciones, las plantas, los mundos… Por ello la Quinta Dimensión es la guía y maestra de la 3D; es la que ordena, da sentido, misión, entendimiento… Es el Observador.

YO: Wow… Es el espejo de un laberinto que fractaliza a mi ser por cientos, mostrándome todo lo que puedo ser y lo que he sido, ayudándome a no perderme en la inmensidad…

SOY: Y en todos estos reflejos descubres todos tus potenciales, tus maestrías, tus sombras, y ves cómo todos se referencian en ti así como tú en ellos. Puedes tocar el tiempo y el espacio, eres la tangente, eres el punto de convergencia…

YO: Soy la Unidad…

SOY: Y cuando ames la unidad en ti, serás todos los maestros, pues recordarás que todas las maravillas y sabiduría de esta dimensión, siempre estuvieron dentro y fuera de ti.

YO: Yo Soy Amor en Unidad…

SOY: Esta es la Quinta Dimensión.