SOY: El tercero de los pilares del Universo es la Integración. Cuando la mente del Universo se expresó, liberando de sí todas las posibles opciones de sí mismo, volviéndose un ser creativo, aunque caótico, su expansión permitió la manifestación de trillones de perspectivas, que mediante la Experimentación, se pudieron vivir, experimentar mediante los sentidos. Cada opción se volvió un individuo en sí mismo, un punto diverso de observación que nutría a la mente de datos. Pudiendo observar una misma cosa desde diferentes ángulos, la experimentación habilitó la evolución, mejorando la manera de captar y transformar la realidad. Los diferentes puntos de vista, encontraban el potencial de su ser cuando conectando las visiones de la idea, se permitía crear una nueva opción superadora de las anteriores; lo cual generaba un tejido coherente y ordenado, que tiene como objetivo primordial encontrar el balance entre las percepciones, encontrando estabilidad. Esa instancia es llamada Integración.

YO: ¿Qué significa?

SOY: Integrar viene de “in” (dentro) y “tangere” (tocar), por lo tanto, es la acción de incorporarse a lo que es tangible, o hacer de algo una realidad palpable. Podríamos tomar también la opción “tegere”, proveniente de “tejer, tejido”, que habla de conectar las cosas que están separadas, como hilos separados que se entrelazan para formar una nueva estructura en unidad.

YO: Podría decir, pues, que yo soy un tejido tangible que surgió de las historias individuales de mi padre, mi madre, mis abuelos y abuelas, y así sucesivamente…

SOY: Así es. El ADN podría verse como ese tejido que une todos los hilos de la historia que nos hace ser quienes somos. Las partículas subatómicas se entrelazan magnéticamente entre sí, y lo mismo repiten los átomos tejiendo moléculas, y éstas a los compuestos químicos, y de allí, a los tejidos orgánicos que desarrollan órganos, cuerpos, y entidades complejas. Trillones y trillones de organismos individuales que se interrelacionan para conformar un individuo mayor, el cual realiza la misma tarea, como un eco del micro cosmos pero en el macro cosmos. Pues los que llamas desde lo humano como interacción cultural y social, a nivel de la base de la vida podrías llamarle simbiosis homeostática. Cada célula en un cuerpo cumple la misma función que un individuo en la humanidad.

YO: Me pregunto, ¿entonces a qué nos referimos cuando decimos “ser íntegro” o una “persona íntegra”?

SOY: El concepto Integración llevado al atributo o adjetivo, describe a una persona, ser o entidad que toma cuenta de todas las cosas que le componen y vive en armonía con todas ellas. La cualidad de ser tangible y unificado es la Integridad. Un ser desprovisto de integridad es el que no actúa en función de lo que siente, o que no siente en función de lo que piensa.

YO: O sea que es lo mismo que ser coherente o incoherente.

SOY: Tiene su conexión, pero la coherencia habla más de la metodología, y la integridad habla más del contenido. Mientras que un ser coherente debe buscar la manera de hacer que su mente, emoción y acción sean correlativas entre sí, la integridad habla de si todas esas cosas que componen la acción, la emoción y la mente están visibles y son viables de ser conectadas, o si están ocultas o abandonadas, así como reconocidas y activas en un individuo.

YO: Solemos decir que una persona es íntegra cuando hace honor a sus valores, a su ética, cuando respeta y vive desde la verdad. Por lo tanto, es alguien que hace siempre lo correcto para sí mismo y para su entorno.

SOY: Sí, pero hay gente que hace eso desde la hipocresía, justamente para tapar sus falencias de integridad. Lo que define a una persona íntegra no es por lo que hace, sino por lo que es. La persona íntegra no demuestra mediante actos externos, sino que su vida privada y pública se correlacionan, su mundo interno y externo se ven enlazados como uno. Alguien íntegro ha logrado integrar sus sombras y sus luces, dejando de luchar. Quien es íntegro reconoce su historia y la honra, alguien íntegro no se escapa de sus responsabilidades, y se hace cargo de sus defectos, errores y aprendizajes. Alguien íntegro es aquel que ve la unidad en todos los aspectos de su vida, y que a partir de los agentes externos ha logrado constituir un agente interno consciente.

YO: ¿Cómo sería esto?

SOY: Es la razón por la cual estamos trabajando la Integridad en el día del Plexo Solar. El plexo hace referencia al ego, a uno mismo, al centro de la personalidad, donde se forma el individuo que soy; y por lo tanto, es desde aquí desde donde nos posicionamos y reconocemos uno entre varios, y nos relacionamos desde uno mismo con los demás. La imagen más certera y real de la integración, es justamente encarnada en el plexo, mediante el cordón umbilical. Este cordón es un entramado de tejidos, venas, conductos, que nutren al cigoto, y de allí, al feto hasta convertirse en un bebé. Este tejido absorbe todo lo que la madre, un ser externo, le proporciona, y como la raíz de un árbol, los nutrientes del mundo y la madre llegan al bebé hacia el plexo solar, conformando lo que es. Puedes entender con esta imagen, cómo este patrón se sigue repitiendo en la vida, en que nuestro ser, nuestro ego en constante formación, sigue absorbiendo nutrientes e información de otras personas mediante el plexo, mediante el ombligo, a través de las relaciones, de la emoción producida por los vínculos.

YO: Cada vínculo que creo con alguien me alimenta, nutre mi ego, haciéndome ser lo que soy. Con mi familia, amigos, parejas, e incluso en relaciones como las de empleo, o de sumisión, o de enemistad. O sea que mi cordón umbilical sigue activo, integrando todo lo que fluye en el mundo externo para formar mi mundo interno.

SOY: El tejido de la vida, el tejido del Yo.

YO: Yo soy un tejido conformado por hilos de todos aquellos con los que me he relacionado y me vinculo.

SOY: La Integración, por lo tanto, es el acto de reconocer todas las cosas que hacen que seas lo que eres. Tanto en lo negativo como en lo positivo, eres la creación de un entrelazamiento de redes. Y si no reconoces estas redes, de dónde vienen estos hilos, o si los ocultas, los cortas, los ensucias, todo ello perjudicará tu integridad. Justamente esconderlos, cortarlos, dañarlos, es lo que hace del ego una presencia no íntegra, con lo cual la mayoría de las personas relaciona a la presencia egoica.

YO: O sea que el ego que todos conocemos no es más que la presencia del ser pero “con los hilos sueltos”. La tarea sería, pues, unir la puntas… Remendar las partes heridas, cortadas, saber con qué me he estado nutriendo hasta ahora…

SOY: Relaciones familiares, amorosas, amistades, dependencias, noticias, contenidos de lectura u online, arte, cultura, religión, creencias, todo aquello que nos ha ido otorgando contenido de actitudes y aptitudes, que han moldeado nuestras emociones, estados de humor, que son la base de nuestra vida, combustible del ser.

YO: Bueno… Podría decir que esta parte es muy difícil, la de integrar, pues hemos sido criados en la lucha, en el rencor, en la separación, en creer que debo competir por sobre otros y no con otros. Cuando escuchamos la palabra integrar, solemos reconocer que hay que aceptar al otro, aceptar nuestras sombras… 

SOY: Alguna vez hemos descrito la integración de la siguiente manera, incorporando los otros 3 fundamentos. Imagina que la Mente Cósmica es un niño de 6 años con una gran imaginación. De repente, ese niño, dejó de compartir habitación con sus padres y tiene su propio cuarto, donde los padres le dicen: Puedes hacer lo que quieras aquí, es tu espacio. El cuarto es el Universo, y este niño con gran capacidad creativa, se pone manos a la obra. Toma las pinturas, hojas, lápices, juguetes, y empieza a proyectar su imaginación creando un mundo alucinante. Construyendo túneles con sillas y sábanas, recortando hojas con tijeras, pintando planetas en ellas, y pegándolas en los túneles. Haciendo castillos de lego representando civilizaciones intergalácticas, y construyendo aliens con plastilina. Toda esa expresión, es conocida como experimentación, en que destina un momento a probar cómo diseñar cada cosa que realiza, jugando e imaginando posibles destinos para cada uno. Entonces, se oye la voz de la madre o el padre que se asoman a la puerta, y le dicen: “es momento de ordenar tu cuarto”. En ese instante, todo se ralentiza. Hay que tomar consciencia de todo lo que se hizo, para comprender dónde están las cosas, y dónde van ubicadas nuevamente. Hay que hacer el camino inverso para reconocer lo que ha creado, pero también de dónde vienen las cosas.

YO: “A guardar, a guardar, cada cosa en su lugar”… Entonaban como cantito las maestras de mi parvulario.

SOY: Ese camino de reconocimiento y ordenamiento de las cosas, se llama Integración; momento en que la experimentación se detiene por un instante, para tomar consciencia de la conexión entre todas las cosas, la lógica y las razones de sus existencias. Así, integras. Y te liberas de los vínculos de lo que es, abriéndote a lo que podrá ser, te desapegas de las formas, porque sabes que vendrán nuevas, ya que al día siguiente, volverá a expresar, a experimentar, con los mismos elementos, pero creando algo diferente y trascendental, es decir, el proceso de Trascendencia.

YO: Me queda claro.

SOY: Así que, te invito a hacer un proceso de integración.

YO: ¿Cómo?

SOY: La tarea de hoy es buscar las herramientas de las que dispongas a mano, ya sea lápices, verduras, hilo, plastilina, plantas, semillas, hojas; cualquier cosa que esté a tu alcance, y que construyas un entramado. Elige algo que te represente a ti en el centro, y empieza a tejer esta red hacia ti, pero en tanto lo hagas, debes dar una intención a cada objeto, cada uno es algo que te nutre, por lo tanto, debes reconocerles en tu historia, en tu familia, en las relaciones… Construye los caminos que se integran en ti, y reconoce que eres todo ello.

YO: Entiendo… Lo haré.

SOY: Disfruta del tejido, es fundamental que tu cuerpo envíe las señales a tu mente de que estás poniendo la intención de volverte un ser íntegro, aceptando tus sombras y tus luces. Une tu historia en ti, describe lo que posees en tu interior. Simplemente teje el ser que eres.

YO: Yo soy un entramado de redes.

SOY: Y yo soy el Diseñador de esa Red.