YO: Me he despertado pensando en futuro. En proyectos que vendrán. Me siento atado de manos, de todas formas, hasta que mi misión no termine en 2022, siento que no podré hacer nada de lo que imagino en mi cabeza.

SOY: Bueno, todo es una idea, y si le das forma, toda idea es capaz de manifestarse.

YO: ¿Cómo hago para que una idea de manifieste?

SOY: Recuerda, el Universo es Mental, y por lo tanto, todo lo que existe no es más que una comprensión de sí mismo.

YO: Pero eso, es raro, en cierta forma, porque desde ese lugar, la duda que me llega es: ¿las piedras piensan? Si todo es mente y la manifestación es la mente misma reconociéndose, entonces, eso implicaría que hay un pensamiento consciente en objetos inorgánicos también… ¿Cómo se explica?

SOY: Esto se debe a tu concepción de lo que es la mente, erróneo por cierto.

YO: ¿Cuál es entonces?

SOY: La Mente, es producto de una red inteligente de intercambio de datos por pulsos magnéticos y eléctricos que son vehículos de la información. La Consciencia es el ente, agente, entidad o sujeto, conformado por este intercambio de datos, ya que la palabra proviene de que todas aquellas partes separadas entre sí (“scire”= saber, conocer; del indoeuropeo “skei”= cortar, partes) que se unen (“cón-“= unidad, conjunto de algo, de partes en este caso), que han tomado entidad por sí solos (“-ent-“= ser). Consciencia es el conjunto de las partes reconocidas de un ser. La Mente y la Consciencia no son conceptos propios de la especie humana, y sin embargo, tendéis a humanizar la idea de Mente y Consciencia cuando hablamos del Universo. El Universo es mente, no es mente humana, pues la mente humana es una distorsión de la mente del Universo. No es un señor o señora pensando, es simplemente una red de datos interactuando. ¿Entiendes?

YO: Claro… O sea, lo que pasa es que los humanos no podemos entender el objeto sin el sujeto. Es decir, relacionamos inevitablemente una acción con alguien, y ponemos una forma a ese ser que encaje con nuestros patrones de existencia. Humanizamos la Mente.

SOY: Por ello es difícil que comprendáis la Mente Universal si la resumís a meros parámetros terrícolas. Ahora bien, teniendo esto en consideración, podrás ver que la Mente es un tejido eterno de intercambio de datos, que conforma distintos tipos de interacciones en distintas dimensiones y reinos, mineral, vegetal, animal, hasta nosotros, humanos; y esto es sólo hablando de este mundo, ya que en otros cada historia será única. La clave que te deja esta idea, es que todo existe simplemente por una extensión de datos, intercambio de información, que nos pone en proceso de formación.

YO: O sea que para que una idea se manifieste, es necesario el intercambio de datos entre las partes, como las neuronas en el cerebro o las células en un tejido.

SOY: Y habrá dos maneras concretas de realizar este intercambio: vertical y horizontal.

YO: ¿Cuál es la Vertical?

SOY: Es la que se refiere a uno mismo: la conexión entre Espíritu, Alma y Cuerpo. No hay manifestación si no hay coherencia entre estos tres aspectos. El aspecto mental del espíritu, el emocional del alma y el físico del cuerpo, deben encontrarse en interacción fluida y constante para que la manifestación sea posible.

YO: ¿Por qué a mucha gente mala le es más fácil manifestar, y a gente con buena voluntad, le es más difícil?

SOY: Porque normalmente aquellos que consideras malos, son coherentes consigo mismos.

YO: ¿Eh? Pero si hacen el mal… No son coherentes. ¿Cómo sus espíritus estarían de acuerdo con que se haga algo malo?

SOY: En primer lugar, el espíritu no posee moral, para el espíritu no existe el mal ni el bien, y por ello el espíritu te da la licencia de la imaginación, en la que puedes hacer lo que quieras sin juicio alguno. El espíritu es un pulso de consciencia, no un juez de tus actos. En segundo lugar, no son coherentes con el entorno, pero sí consigo mismos, a nivel Vertical. Pues lo que piensan es lo que sienten, y lo que sienten es lo que hacen. Las personas que muy ligeramente llamas “buenas”, son las personas que se ven estancadas en un patrón, temerosos de las reglas, y que siguiendo una especie de moralidad, se prohíben ver fuera de la caja. El primer error es pensar que hay gente mala o buena. Nadie nace bueno o malo, las actitudes se construyen a lo largo de la experiencia. Esto no significa que hay que ser malo para ser manifestador, sino coherente con uno mismo. Y ahora le daré alivio a tu moral: si lo que hago es coherente conmigo mismo, pero incoherente con el medio que me rodea, la manifestación acabará por colapsar, destruyéndose a sí misma.

YO: ¿Y por qué entonces hay cosas malas que perduran tanto, como dictaduras, hambre, guerras, corrupción…?

SOY: Porque son coherentes con el medio que les rodea. Una guerra sólo se sostiene si los agentes que le contienen vibran en el mismo estado, la corrupción se sostiene si el medio que le rodea lo habilita. Alemania, por ejemplo, vivió ese estado de guerra, corrupción, odio, destrucción, racismo, pero no fue sostenido en el tiempo por ese país pues la mayoría de sus individuos no sostenían esa energía, y por ello colapsó, renaciendo.

YO: Es bueno saber que hay oportunidad de renacer.

SOY: Siempre, como te he dicho, es una constante de transformación.

YO: Queda claro entonces el rol de la coherencia horizontal…

SOY: Exacto, aquella que implica ser lógico con el plano que me envuelve, que rodea. Si la coherencia vertical y la horizontal se unen, la manifestación es inminente. Pues has creado un nodo, una cruz. El intercambio de datos verticales generan un flujo de energía interno y propio, que hace que lo que pienses baje a las emociones, y de las emociones se active la acción, mientras que a nivel horizontal, necesitas compartir estos datos con otros.

YO: Esto es lo que suelo hacer siempre, aunque no tenga claro que un proyecto pueda ser posible, enseguida lo hablo con amigos o personas interesadas en el proyecto, para hacerlo posible y viable. Cuantas más mentes lo tengan en sus pensamientos, más fácil será de cocrear.

SOY: Si consideramos que cada persona es una neurona, la interacción entre las mismas hace que una idea sea más propensa a volverse una acción. Es así que una simple idea, empieza a tejer redes de datos, uniendo agentes diferentes, tomando consciencia de sí misma, formando entidad, que le permita manifestarse en la materia. Es como nacer.

YO: ¿Nacer?

SOY: La mayor de las manifestaciones de la mente universal, es la capacidad de crear tejidos, redes, que le permitan a esta mente manifestarse como individuo, como ser pensante, único, que tome consciencia de sí mismo. Como hemos dicho alguna vez, Nacer es llevar algo nuevo a la luz, del indoeuropeo “gen”, que significa parir, dar a luz, y da origen a palabras como genes, genitales, género, genoma, y que en su modificación fonética al forma un verbo pasó de “gen” a “gne”, y de allí a “gnasci”, que nos dio “nacer”; palabra compartida en inglés mediante “natividad” (natality, nativity). El concepto de Nacimiento, pues, es la forma de comprender la manifestación de la Consciencia Divina, en que la red de datos conforman un sujeto o entidad consciente, capaz de crear por sí misma, viviendo la realidad.

YO: O sea que, la manifestación es comparable al nacimiento de un aspecto de la idea cósmica.

SOY: O en todo caso, la manifestación de la idea cósmica es la que da lugar al nacimiento. Cada vez que una red caótica de algo que se encuentra en proceso de transformación, perecimiento, se disipa para nutrir nuevos cuerpos; esta energía se regenera en forma de un renacer. Como el ciclo de regeneración de un campo en que nada se desecha, todo se utiliza, la Tierra reutiliza las mismas moléculas una y otra vez, los mismos tejidos. Nunca nada salió de este mundo, siempre hemos estado aquí, siempre es la misma materia, que sólo se ha ido modificando en sus formas. El perecimiento es la clave del nacimiento, la muerte es clave de la vida, así como la idea es fundamento de la manifestación.

YO: O sea que, por lo que entiendo, para poder manifestar, debo renacer.

SOY: Debes permitirte resurgir de las cenizas. Sólo puedes renacer cuando estás dispuesto a reutilizar tus viejas estructuras como compost para tu nueva creación. De igual manera que hemos visto cómo la Expresión es fundamento para Experimentar, y lo que experimento busca inevitablemente ser Integrado, para realizar luego el difícil paso de soltar, Trascender, para así reestablecer el ciclo volviendo a Expresar; en los aspectos más concretos, estos fundamentos universales se desarrollan en los conceptos de Reproducirse, Crecimiento, Perecimiento y Nacimiento. Una vida humana suele alinearse en nacer, crecer, reproducirse y morir, un camino lógico en el transcurso de una vida. Pero en la existencia del universo, los ciclos se repiten, y una vez que mueres, naces, no porque salgas de un cuerpo para entrar en otro, sino porque tu cuerpo se disipa y tu energía es reabsorbida por el ambiente donde se manifestará. Es una constante. El Renacimiento es inevitable y lógico desde el punto de vista energético, pero para que haya un nacimiento, algo viejo debe morir.

YO: Ayer te lo dije… Estoy dispuesto a dejar morir, perecer, lo que traía hasta ahora, para poder nacer de nuevo.

SOY: Entonces, comprendes que tu energía debe mirar hacia el futuro, dejando de ver hacia el pasado. Por ello has despertado con ideas de manifestación a futuro, de cosas que no te llevan atrás, sino delante.

YO: Sí… Estoy renaciendo. Y ese renacer implica manifestación…

SOY: La etapa de nacimiento es la culminación de un proceso de interconexión de datos, y el inicio de una expansión de los mismos. Todo este tiempo has estado gestándote a ti mismo, has estado nutriéndote de la Madre Tierra, de la sabiduría del Yo Soy, y cada dato que hemos hablado, te ha ido llevando a unir los datos, las redes que te permitan ser lo que eres hoy. ¿Te das cuenta?

YO: ¿De qué?

SOY: De que hoy se cumplen los 9 meses de tu gestación. Es momento de nacer. Has comenzado este camino el 30 de Julio de 2020, y mañana, es tiempo de dar a luz.

YO: Uf… ¿Eso qué significa?

SOY: Que has estado trayendo la idea del espíritu, del universo, aquí y ahora, unificándolos en ti, en la Red, dando forma a todas las energías que crean los tejidos de información. Y por lo tanto, mañana, día 30 de Abril, podrás sellar todo lo que has gestado hasta hoy…

YO: ¿Y luego?

SOY: Te daremos la bienvenida al Hogar. La Casa, los Amigos y la Familia te esperan.

YO: Tauro, Géminis, Cáncer…

SOY: Inspira profundo hoy… Pues mañana, habrás de nacer.

YO: Inspiro toda esta energía que he diseñado para mí, y así manifestarla en mi hogar, en mis hermanos y hermanas, en la familia que somos…

SOY: Bienvenido a la Vida, Bienvenido a Casa.