YO: Ayer explicaste que el Corazón no es el productor de la sangre ni el origen o destino de la red biológica como a veces pensamos desde lo filosófico o emocional, sino que forma parte de un mecanismo armónico en el cual su función es básicamente la distribución y el impulso de dicha sangre mediante el latido, para un correcto dar y recibir.

SOY: Así es…

YO: Dijiste que la sangre es el vehículo de todos los recursos necesarios del cuerpo, de lo que genera energía, y que proviene de 3 sitios principales: la médula ósea, los pulmones y los intestinos.

SOY: Aha…

YO: Entonces tengo dos dudas: ¿cómo llegan esos nutrientes exactamente a nuestro cuerpo? y ¿cómo es que producen energía?

SOY: Excelente. Vamos paso a paso entonces, a comprender el aparato que permite esto: el Sistema Digestivo.

YO: Del que prácticamente más he oído en la vida, porque todo el mundo habla de lo que comemos.

SOY: Pero por más que se hable de él, es probable que ni siquiera nos acerquemos a lo básico de su entendimiento. El Sistema Digestivo es una fábrica de producción de energía, de ensamble y desensamble de productos, utilizando productos tóxicos muy dañinos, pero necesarios para el desarrollo, y es, probablemente, el sistema con mayor cantidad de microbios que viven en armonía con nosotros, en simbiosis. Es el productor principal, generador de todos los productos que mantienen vivo al cuerpo.

YO: Wow… O sea que, es el sistema fundamental desde el principio de los tiempos…

SOY: Así es, pues lo primero que hace un átomo en la existencia es buscar energía, consumirla, ahorrarla, y en el caso de un organismo, compartirla para un mejor funcionamiento. Este sistema es justamente el que consume, ahorra y produce para compartir con el resto del organismo. El mismo se ha complejizado a lo largo de la evolución, de distintas maneras según la especie, como todos los sistemas biológicos, sin embargo, estamos aquí sobre todo para conocer el humano. Entonces, volvamos a la base: todo busca energía. Pero: ¿de dónde obtienes la energía?

YO: Bueno… Si la energía es vibración, y la misma se produce por ondas de frecuencia y polaridades, entonces tendrá que encontrarse en la interacción entre lo positivo y negativo…

SOY: Así es. Imagina la energía como la fuerza de las cuerdas de vibración que hacen posible al magnetismo, que unen los extremos positivo y negativo. Si estas dos polaridades se unen y contraen, se generará reserva de energía, estabilidad, pero si necesitas acción, movimiento y cambio, deberás separar esta polaridad, estirando esta cuerda hasta romperla, la cual como un elástico, al cortarse liberará una tensión enorme que llamarás energía, es decir, fuerza de trabajo, de movimiento.

YO: Toda energía es producida, pues, de la separación o ruptura de una estructura atómica… ¿No?

SOY: Sí, es la elasticidad que se produce en las ondas entre electrones y protones. Como solemos decir siempre, el universo busca la estabilidad y el ahorro de energía, pero para mejorar su capacidad de ahorro, la misma se ve forzada a evolucionar, a desarrollar formas mejores, pues los ambientes son cambiantes, y el caos del entorno fuerza a los átomos a adaptarse, lo que modifica su composición y orden, generando nuevas estructuras. En ese momento de reordenamiento, los átomos pierden energía, pero al mismo tiempo, esto significa que el conjunto molecular u organismo, recibe energía, es decir, que obtiene una fuerza extra, un impulso que le mueve.

YO: Entonces la energía de la que hablamos que nos moviliza, que nos impulsa a realizar lo que hacemos, proviene de la división de moléculas y la liberación de energía acumulada en los enlaces de los átomos…

SOY: Así es. Ahora bien, vamos al principio. La principal fuente de energía en un mundo en desarrollo, era la energía fotónica del Sol, y los químicos emergidos de los volcanes marinos. La alta vibración de los componentes volcánicos que se liberan por la presión, y el movimiento de los fotones en el ambiente, permitían que los electrones vibraran mucho más rápido de lo normal en ese entorno hostil, lo que se traduce como “calor”. El calor, el fuego, permite la fusión o división de elementos químicos, que genera transformaciones, alquimia, reacciones químicas, en las cuales se libera esa energía. Las primeras células existentes debido a estas reacciones, en una fusión de azúcares y minerales, comenzó a absorber esta energía liberada en el ambiente, la cual les permitía moverse y crecer. Con el tiempo, estas células desarrollaron la habilidad de realizar esa división y extracción de energía por sí mismos, captando elementos químicos del ambiente, y procesándolos en su interior en una especie de trabajo en cadena, en que cada uno de los compuestos químicos internos de la célula cortaban partes y pegaban otras, para obtener un producto que generase energía o acumulación de la misma, liberando lo que sobraba.

YO: La imagen que tengo es como si un árbol fuese una molécula, y una familia de varias personas fuesen esos componentes.

SOY: Enzimas… Los individuos serán enzimas.

YO: ¿Qué es una enzima?

SOY: Del griego “én” y “zymé”, significando “fermentación interior”, a lo cual fermento viene del latín “herbir”, haciendo alusión a que el fuego une las cosas, produce reacciones. Las enzimas son compuestos químicos que habilitan las reacciones químicas en otros compuestos externos.

YO: Ok. Entonces, estas personitas enzimas toman el árbol y, debido a que llega el invierno, deciden talarlo. Unas de esas personas recogerá sus frutos para hacer dulces y reservas. Otra personita tomará las semillas para hacer cultivos para crear más árboles. Otra persona cortará todas las hojas para alimentar a los animales. Otra persona cortará las ramas para tener reserva de leña para la chimenea, y otra persona cortará el tronco para obtener madera para reforzar el techo de la casa. Así, lo que antes era una sola cosa, un árbol, pasó a ser parte de muchas más cosas, generando energía para el invierno.

SOY: Muy bien. Se entiende. Ahora, cuanto más grande es el ser, más complejo se vuelve el sistema de asimilación de energía. Esto divide a dos grandes reinos: los procariota y los eucariota.

YO: ¿Qué son? 

SOY: Describen el desarrollo, forma y contenido de una célula. Los procariota (“pro”= antes, “karyon”= nuez, “tes”=agente), son células propias de las bacterias, en que una fina membrana separa lo externo de un contenido disuelto donde el ADN se ordena en una única larga cadena enroscada, sin poseer núcleo. En cambio, las eucariotas (“eu”= nuevo, “karyon”= nuez, “tes”=agente), poseen núcleo (donde existen diversos cromosomas del ADN) y organelos, es decir, pequeñas estructuras internas que realizan funciones diversas, todas flotando en el citoplasma, como la Mitocondria, el retículo endoplasmático y el aparato de Golgi. La mitocondria (“mito”= filamento, hilo; “khondros”= grano) aquí es uno de los fundamentales a comprender, pues es la encargada de la respiración de la célula.

YO: ¿Las células respiran?

SOY: Respiran y comen. Recuerda que antes de ser lo que eres, has sido un organismo unicelular. Todos los seres eucariota (animales, plantas, fungi), necesitan generar energía en sus células, y la mitocondria se encarga de esto en un proceso conocido como “ciclo de Krebs” (en honor a su descubridor en los años 1930), o también “ciclo del ácido cítrico”. En este circuito, ciertas enzimas se dedican a tomar moléculas de carbono y realizar diversos cortes en diferentes momentos del proceso, para generar moléculas nuevas almacenadoras de energía (ATP= adenosín trifostato, que transporta la energía para todos los funcionamientos de la célula; y GTP= guanosín trifostato, mensajero que señaliza a las proteínas qué funciones químicas realizar).

YO: Uf… Se complica.

SOY: Toma el ejemplo del Árbol. La Casa es la célula, y la familia es la mitocondria. Imagina que talan el árbol y las enzimas más fuertes de la familia lo trocean en partes. Luego, la familia se sentará en un círculo alrededor del árbol, y cada uno irá sacando una parte del mismo, los frutos, hojas, ramas, semillas, corteza, procesándolo, pasándose las partes entre ellos, almacenándolo todo según su función en diferentes partes de la casa, mientras que las semillas serán utilizadas para crear más árboles iguales para los siguientes años. Esto es lo que llamas el ciclo de Krebs, es un recorrido circular que los humanos realizan en cada cambio de estación del año con los campos y la producción, sólo que en las células pasa en cuestión de milésimas de segundos.

YO: Claro… Entiendo. O sea que así se obtiene la energía, son pulsos eléctricos de descargas generadas en la división o unión de moléculas, en la ruptura de átomos de carbono…

SOY: La principal fuente de energía es el “acetil-CoA”, el cual se obtiene de la oxidación de carbohidratos, lípidos, proteínas y azúcares.

YO: ¡Oh, por ello necesitamos respirar oxígeno!

SOY: Así es. En grandes cantidades, para poder oxidar todos estos elementos. Y ahora la pregunta sería: de dónde obtienes todos esos carbohidratos, lípidos, proteínas y azúcares?

YO: Comiendo…

SOY: Exacto. Todos estos ácidos, aminoácidos, proteínas, glucosa, carbohidratos, lípidos, todos se encuentran diversificados y dispersos en la naturaleza, en la composición química del reino animal, mineral y vegetal. Para poder generar energía en el cuerpo, necesitas consumirlo del mundo externo. Pero, no puedes pasar la glucosa de una manzana a la célula poniendo la manzana entera sobre tu piel y apretando… Necesitas separar la glucosa de muchas otras cosas, hasta que sólo esté sola, por separada, de todas las fibras y otros componentes necesarios para otras partes del cuerpo, o partes que no serán necesarias y habrá que desechar. Y es aquí donde entra el sistema Digestivo.

YO: Wow, es fascinante, todo esto para entender por qué comer y beber…

SOY: Digestivo viene de las palabras “di-” (separar, dividir) y “gerere” (llevar a cabo, generar), por lo que digerir es el acto de separar las cosas.

YO: Igual que cuando queremos digerir una información que nos pareció mucho, y hay que procesarla de a poco, dividiéndola por partes para asimilarla. Como todo lo que estamos hablando jeje.

SOY: Sí. El sistema digestivo incorpora diversas partes útiles que se encargarán de fragmentarlo todo hasta su mínima expresión, con el objetivo de llegar al fondo de los átomos y poder cosechar la energía que guardan en su interior. Es como si el verdadero objetivo que posees es lograr extraer la nuez de su cáscara, y para ello, cortarás las ramas, quitarás las hojas, tomarás el fruto, pelarás la carcasa, hasta encontrar la capa que recubre la semilla, donde encuentras la cáscara que deberás romper para encontrar la semilla, la cual al partir en dos, encontrarás los nutrientes que buscabas. Y para ello, debes dar un primer bocado.

YO: La boca.

SOY: Los labios son el primer contacto sensitivo que nos avisará si el material está frío, caliente, tibio, y si está en condiciones de ingresar a la boca o no. La lengua, con el sentido del gusto, avisará al resto del sistema de qué materiales estamos hablando, para que el organismo se prepare para obtener específicamente lo que este producto me entregará. Los dientes son el primer paso de división. Sus funciones de corte, arranque y triturado forman un bolo alimenticio. Este bolo (del griego “bolé”= pelota que se lanza), pasará por todo un sistema de separación que permitirá al organismo asimilar las moléculas, algo que se llama “metabolismo” (“metá”= después, a través, “bolé”= lanzado), es decir que el metabolismo de un ser vivo es la capacidad que posee de lanzar el producto a través de un proceso de división.

YO: Oh, recién logro entender a qué se refieren como bajo o alto metabolismo. Poca o mucha capacidad de división de los productos.

SOY: Sí. Podrás entender aquí, que los problemas en los dientes estarán relacionados a tu incapacidad de gestionar o analizar algo en tu vida, de no poder digerirlo, procesarlo bien (ver biodecodificación dental). A partir de aquí, las glándulas salivares se encargarán de mejorar el flujo del bolo hacia el estómago a través de la faringe (compartida con el conducto respiratorio), y de allí al esófago, el cual atravesará por detrás del corazón y pulmones hasta llegar a la boca del estómago. Dentro del mismo se produce una de las acciones más duras del cuerpo físico: la descomposición química. El estómago es un saco de tejidos fuertes que contienen ácidos corrosivos que pueden quemar y desintegrar compuestos orgánicos. Estos compuestos son producidos por la Vesícula Biliar, el Hígado y el Páncreas, los tres unidos al Duodeno, desde donde estos ácidos gástricos ingresan al Estómago y por donde los alimentos acabarán pasando hacia el intestino delgado convertido en quimo, una masa pastosa. El Hígado es encargado de generar la bilis, el ácido que permitirá, junto a los jugos pancreáticos, disolver los alimentos, y esta bilis es guardada en el saco vesicular hasta el momento necesario de la digestión estomacal. Una vez que el quimo está listo, se desliza por el duodeno hacia el yeyuno, ambos siendo el ingreso hacia el intestino delgado, unos aproximadamente 7 metros de tejido enroscado por donde el quimo será impulsado por un largo viaje, a través del cual una constante hilera de vellosidades acariciarán esta pasta absorbiendo todos los nutrientes, casi como una extensa cinta mecánica donde millones de productos se deslizan, mientras millones de trabajadores a sus lados seleccionan los productos buenos dejando pasar los malos. Así, carbohidratos, azúcares, lípidos, proteínas, son capturados por el intestino delgado, acabando su recorrido en el último trozo del mismo llamado íleon, conectado al intestino grueso o colon. En esta parte, todos los líquidos terminan de ser absorbidos, compactando los residuos que el intestino delgado seleccionó como innecesarios, y formando el bolo fecal, el cual acabará por ser excretado por el ano.

YO: Vaya viaje… 

SOY: Y el resto ya lo conoces. Los capilares del sistema sanguíneo toman estos nutrientes, los unen con el oxígeno, producen la reacción que da lugar al acetil-CoA, que será base para que las enzimas dividan los átomos de carbono y generen ATP: Energía.

YO: Y así puedo moverme…

SOY: Así puedes vivir. Como ves, la materia no es algo diferente al mundo espiritual, sino que en su complejización, sólo encontró diferentes mecanismos para vivir de lo mismo que las almas y los espíritus. En la infinita capacidad manifestadora de la mente universal, la energía sólo encontró diversas formas de seguir creando y expandiendo. El sistema digestivo es el eco del sistema de creación, es el eco de los diseños de la esencia, manifestando las personalidades, es el camino de la vida.

YO: El camino iniciático…

SOY: Donde ingresas como un todo, y recorres un largo camino para descubrir la esencia que eras, la energía que vive en ti.

YO: No volveré a ver una comida de la misma forma que lo hacía antes… Pensar que cada día recorro un camino iniciático a ser lo que verdaderamente soy, en cada desayuno, en cada almuerzo, en cada cena…

SOY: Eres lo que comes.

YO: Y si yo soy uno de esos alimentos realizando mi camino iniciático hacia la esencia… Entonces el universo, el cosmos, se alimentan de mí, y por ello, el Universo soy Yo.

SOY: Lo has entendido. En cada paso que realizas discerniendo lo que eres, nutres al universo con tu energía, y dejas de ser alimento cósmico, para volverte parte del Cosmos.

YO: En mí, millones de seres realizan su camino hacia la esencia…

SOY: Por ello, hoy puedes decir esto…

YO: Yo Soy el Canal de los Seres.

SOY: Soy alimento divino, esencia del cuerpo cósmico.

YO: Soy el Universo.